París, Fra.- Los activistas del movimiento chalecos amarillo protestaron el sábado en varios puntos de Francia, en apoyo a una activista que resultó herida en una confrontación con la policía la semana pasada y para demostrar que siguen resistiéndose a las políticas económicas del gobierno.
Los manifestantes no se desalentaron por la prohibición policial de las protestas ni por las personas que han resultado lesionadas en 20 semanas de protestas, así que otra vez salieron a marchar el sábado por las calles de la capital París, Burdeos y otras ciudades para presionar al presidente Emmanuel Macron para que haga más por la golpeada clase trabajadora de Francia o que simplemente renuncie.
Los participantes también demostraron su solidaridad con Genevieve Legay, una activista antiglobalización de 73 años que sufrió una lesión en la cabeza hace una semana en Niza, en el sur de Francia. El fiscal de Niza dijo que un policía la empujó.
Miles de personas marcharon pacíficamente por las calles de París, desde el norte del centro de la ciudad hasta la plaza Trocadero, cerca de la torre Eiffel.
Algunos ondeaban una bandera con los colores del arcoíris que decía “Paz”, la misma utilizada por Legay en la protesta de la semana pasada.