Manuel Guerrero Aviña, mexicano-británico perseguido en Qatar por ser gay y vivir con VIH, envió a la canciller Alicia Bárcena una carta de puño y letra en la que solicitó, de manera urgente, una reunión para discutir distintos puntos como la falta de acceso a su tratamiento antirretroviral, "clave para continuar saludable a corto y largo plazo".
En el texto, el mexicano de 44 años de edad también pide a la Secretaría de Relaciones Exteriores hablar de los diferentes actos de tortura y maltrato a los que fue sometido desde el pasado 4 de febrero, cuando fue detenido con engaños por la policía de Qatar a través de la aplicación de citas Grindr.
Como tercer punto, el connacional busca hablar con la canciller Bárcena sobre su repatriación para salvaguardar su vida.
"Le pido de la manera más atenta acordar un espacio en su agenda. Quedo en espera la hora y fecha de la reunión. Saludos cordiales", se lee en la carta.
Luego de una audiencia en marzo pasado se concedió al mexicano-británico llevar su proceso en libertad, además que se informó que "está en un lugar seguro".
A seis días de que se realice la primera audiencia del juicio al mexicano, el Comité Manuel Guerrero señaló que la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) aún no responde la petición de una reunión.
El próximo 22 de abril se prevé que el fiscal del caso presente cargos y conceda a Manuel Guerrero el acceso a su expediente, después de 78 días de contar con un debido proceso.
Sobre la salud de Manuel Guerrero, se informó que, a más de dos meses de exigencia, se espera que el Estado de Qatar provea medicamentos antirretrovirales: "Se le impondrá un cambio de tratamiento y la situación no se ha resuelto, pues después de la privación a la que fue sometida su carga viral aumentó. Para la adaptación al nuevo tratamiento, Manuel requerirá un seguimiento médico oportuno y adecuado, que Qatar nunca ha brindado".
El Comité Manuel Guerrero urgió al encuentro con la canciller porque el caso "está lejos de resolverse": "Sin la participación de alto nivel del gobierno de nuestro país existe un riesgo de que el caso se prolongue indefinidamente".
A las autoridades mexicanas y de Reino Unido pidieron también condenar la tortura y graves violaciones a los derechos humanos de Guerrero Aviña, garantizando su repatriación.
"Es imprescindible que el apoyo de ambos Estados se mantenga y tome fuerza en lugar de debilitarse. Ni México ni Reino Unido deben perder de vista que los derechos humanos más fundamentales de uno de sus ciudadanos continúan siendo sistemáticamente violados. Su intervención es crucial para que esta situación cese lo más pronto posible: el juicio que Manuel está por enfrentar es en sí mismo injusto, como lo fueron su detención, privación de la libertad y tortura. La exigencia es una e inequívoca: el juicio contra Manuel debe ser suspendido y él debe ser repatriado sin cargos", señaló el Comité.