El gobierno de Somalia ordenó la salida del país del enviado de Naciones Unidas ante la polémica por la detención del ex número dos del grupo extremista Al-Shabab, que optaba a la presidencia de una región.
En un comunicado emitido el martes en la noche, el Ministerio de Exteriores acusó a Nicholas Haysom de extralimitarse en sus atribuciones diplomáticas violando la soberanía de la nación del Cuerno de África y lo declaró "persona non grata".
Haysom había puesto en duda la base legal para la detención de Mukhtar Robow el mes pasado y si la policía de la región de Suroeste, que está financiada por la ONU, estuvo implicada.
Soldados etíopes que forman parte de la fuerza de la Unión Africana en Somalia y agentes somalíes detuvieron a Robow días antes de las elecciones regionales. El arresto provocó protestas con víctimas mortales.
Robow fue trasladado en avión a la capital, Mogadiscio, e ingresó en un penal de la agencia de inteligencia somalí.
Naciones Unidas no realizó comentarios.