Tensión entre Irán e Israel y sus implicaciones

Consecuencias del ataque de Irán y la situación en Oriente Medio

BEIRUT (AP) — El ataque sin precedentes de Irán contra Israel la madrugada del domingo representó un cambio de enfoque de Teherán, que había dependido de esbirros en todo Oriente Medio desde el inicio de la guerra entre Israel y Hamás en octubre. Todas las miradas ahora están puestas en si Israel decide tomar nuevas acciones militares, mientras Washington busca medidas diplomáticas para relajar las tensiones en la región.

Irán afirmó que el ataque fue en respuesta a un atentado aéreo ampliamente atribuido a Israel que destruyó oficinas consulares iraníes en Siria y mató a dos generales iraníes a principios de este mes.

Israel informó que casi todos los más de 300 drones y misiles lanzados durante la noche por Irán fueron derribados por su sistema de defensa antimisiles, respaldado por Estados Unidos y el Reino Unido. La única víctima reportada fue una niña herida en el sur de Israel, y un misil impactó una base aérea israelí, causando daños leves.

Aún así, el jefe de la Guardia Revolucionaria de Irán calificó la operación como exitosa.

Irán ha logrado un equilibrio entre tomar represalias públicas por el ataque en Damasco y evitar nuevas acciones militares israelíes que lleven a un conflicto mucho más extenso, de acuerdo con Mona Yacoubian, vicepresidenta del centro para Oriente Medio y África del Norte del Instituto de Paz de Estados Unidos.

"En este momento, ambos (Irán e Israel) pueden cantar victoria y alejarse del precipicio, sobre todo porque no murieron civiles israelíes", señaló Yacoubian.

Sin embargo, el mundo sigue a la espera del resultado de una reunión del Gabinete de Guerra israelí el domingo. Los israelíes de línea dura han presionado por una respuesta. Pero otros han sugerido moderación y consideran que Israel debe centrarse en fortalecer los incipientes lazos con sus socios árabes.

"Construiremos una coalición regional y cobraremos el precio a Irán, en la forma y en el momento que nos convenga", dijo Benny Gantz, miembro del Gabinete de Guerra.

Los analistas afirman que Irán envió el mensaje de que está dispuesto a intensificar y cambiar sus reglas de enfrentamiento en su guerra en la sombra con Israel.

"Es un disparo de advertencia, que deja claro que si Israel viola las reglas, habrá consecuencias", enfatizó Magnus Ranstorp, asesor estratégico en la Universidad de Defensa Sueca.

El ataque de Irán ha avivado aún más los temores de que la guerra en Gaza cause estragos regionales.

Pero Irán sostiene que no busca una guerra total en toda la región. El ministro de Relaciones Exteriores, Hossein Amirabdollahian, dijo en una publicación en X que Irán "no tiene intención de continuar las operaciones defensivas" en este momento, a menos que sea atacado.

Teherán enfatizó que su objetivo eran instalaciones israelíes involucradas en el ataque a Damasco, no civiles o "áreas económicas".

Después que Israel inició su ofensiva en Gaza contra Hamás, grupos respaldados por Irán se involucraron militarmente al tiempo que Teherán se mantuvo al margen. El grupo libanés Hezbollah disparó cohetes contra el norte de Israel. Los rebeldes hutíes de Yemen atacaron barcos occidentales en el Mar Rojo. Un grupo de milicias iraquíes respaldadas por Irán atacó posiciones militares estadounidenses en Irak y Siria.

Ahora, Teherán está "dispuesto a subir la apuesta" sin depender de esbirros, indicó la directora del Centro Carnegie para Oriente Medio, Maha Yahya.

Aun así, Irán sólo llegó hasta cierto punto.

"Dieron una advertencia suficiente de que esto iba a ocurrir, y creo que sabían que ellos (los drones y los misiles) serían derribados antes que llegaran a territorio israelí", dijo Yahya.

Agregó que la reciente presión en aumento sobre Israel por su ofensiva en Gaza ahora se ha centrado en reducir las tensiones regionales.

Que Israel tome más medidas militares no parece agradar a sus aliados, incluyendo Estados Unidos, subrayó Eldad Shavit, que dirige el Programa de Investigación Israel-Estados Unidos del Instituto de Estudios de Seguridad Nacional, un centro de estudios israelí.

El portavoz de seguridad nacional de la Casa Blanca, John Kirby, dijo a la cadena NBC que el presidente Joe Biden no quiere que el conflicto escale a nivel regional ni una "guerra más amplia" con Irán, y que "trabaja personalmente en el aspecto diplomático de esto".

El domingo se realizaban reuniones urgentes del G7 —la reunión informal de los siete países más industrializados que incluye a Estados Unidos, el Reino Unido y Francia— y el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.