Nueva York, 17 jun (EFE).- El diario The Washington Post señaló este lunes en una investigación a su próximo editor, Robert Winnett, de falta de ética al haber utilizado supuestamente información robada cuando trabajaba en la redacción del medio británico The Sunday Times en la década del 2000.
Winnett, que ahora lidera el Daily Telegraph pero se convertirá en editor de The Washington Post en otoño, se habría valido del material que "robaba por encargo" y con sucias artimañas John Ford, "un ladrón confeso", según este artículo que ha agravado aún más el cisma interno que vive la cabecera.
La pieza de casi 3.000 palabras de The Washington Post se basa en gran medida en una entrevista a Ford de The Guardian en 2018, en la que éste detallaba un 'modus operandi' ilegítimo para conseguir historias exclusivas a Winnett sobre la adquisición del equipo Leeds United, las finanzas de Tony Blair o la lista de clientes para un nuevo modelo de Mercedes-Benz.
Asimismo, en la pieza de The Washington Post se esgrime que Winnett se habría negado a responder ante las preguntas de sus futuros redactores para la elaboración de esta noticia.
The Washington Post, propiedad del fundador de Amazon, Jeff Bezos, ha estado en crisis desde el nombramiento el año pasado de un nuevo director ejecutivo, Will Lewis.
De hecho, estas nuevas revelaciones se suman a otras sobre Winnet y sobre el propio Lewis, a los que una investigación reciente de The New York Times puso en la picota por supuestamente haber utilizado más grabaciones robadas en diversos artículos periodísticos publicados durante sus carreras en Gran Bretaña.
"Dados los conflictos percibidos, hemos pedido al ex editor gerente senior Cameron Barr, que dejó ese cargo en 2023 y ahora tiene una relación contractual como editor asociado senior, que supervise esta cobertura", dijo una portavoz de The Washington Post ante las preguntas de The New York Times.
El caos en el diario de la capital de EE.UU. se acrecentó cuando Sally Buzbee, que se convirtió hace tres años en la primera mujer en dirigir la reputada cabecera, dimitió abruptamente hace un mes y se anunció que sería reemplazada inmediatamente por Matt Murray, ex editor jefe de The Wall Street Journal, hasta las elecciones presidenciales del próximo mes de noviembre.
Posteriormente, se prevé que el que ostente ese cargo sea Winnett, en quien ha confiado Lewis tras años trabajando codo a codo en diversas publicaciones británicas.
Por su parte, Murray se desempeñaría como nuevo director de una nueva división centrada en "periodismo de servicios y redes sociales" y dirigida a audiencias que "quieren consumir y pagar por las noticias de manera diferente a las tradicionales".
La salida de Buzbee se produjo, además, en un momento ya tumultuoso para el periódico, que perdió 77 millones de dólares durante el año pasado y con una caída del 50 % de la audiencia desde 2020, reconoció recientemente Lewis.
The New York Times también informó que Buzbee y Lewis se enfrentaron en las semanas previas a su renuncia sobre si The Washington Post debía cubrir un caso judicial que le involucra a él personalmente por haber bloqueado la difusión de unas grabaciones telefónicas suyas.