Washington, EEUU (EFE).- El expresidente de Estados Unidos Donald Trump (2017-2021), que se postula a las primarias republicanas para los comicios de 2024, presumió este martes de sus buenos resultados en las encuestas, que lo siguen dando como favorito frente a otros candidatos conservadores, pese a afrontar varias imputaciones.
Durante un mitin ante veteranos en Windham, en Nuevo Hampshire, Trump explicó que cada vez que es imputado le gusta consultar las encuestas: "Porque con una imputación más creo que las elecciones estarán resueltas", dijo irónico.
El exmandatario acumula tres imputaciones penales en Nueva York, Florida y Washington DC por el caso del soborno a la actriz porno Stormy Daniels, el de los documentos clasificados que se llevó ilegalmente de la Casa Blanca y el de sus presuntos intentos de cambiar el resultado de las elecciones de 2020, respectivamente.
A estas causas se podría sumar una cuarta imputación penal en Georgia, donde se espera de un momento a otro que Trump sea acusado formalmente por un gran jurado por sus supuestos esfuerzos para alterar el resultado electoral en este estado clave en 2020.
Pese a estos pleitos, Trump continúa liderando las encuestas sobre los candidatos republicanos a la Presidencia, con un 53 % de intención de voto, muy por delante del segundo oponente, el gobernador de Florida, Ron DeSantis, con el 15 %, según la página web FiveThirtyEight, que hace un promedio de los sondeos.
De acuerdo con ese sitio de internet, si Trump se enfrentara al presidente Joe Biden en unas elecciones presidenciales, los resultados serían muy ajustados, con el demócrata como ganador por un solo punto porcentual, pese a que hace dos semanas el republicano estaba por delante.
En su mitin de hoy, Trump reiteró sus acusaciones contra "el corrupto Joe Biden", como lo apoda y de quien considera que está detrás de una persecución política contra él y de las imputaciones en su contra, debido "los números increíbles" que está teniendo en las encuestas.
En lo que ha venido siendo su estrategia, el exmandatario se mostró ante la audiencia como la víctima de una trama orquestada por Biden para silenciar sus denuncias de que hubo fraude en los comicios de 2020, pese a que no entregó ni una sola prueba y los tribunales desestimaron todas las demandas que presentó en su día.
Lamentó que no podrá ir a los caucus de Iowa ni a las primarias de Nuevo Hampshire de 2024 por sus problemas judiciales: "Porque estaré sentado en un juzgado por basura, porque su fiscal general (de Biden) me ha imputado", afirmó Trump, pese a que todavía no hay fecha fijada para el inicio del juicio sobre su presunto intento de revertir el resultado de los comicios de 2020.
Por otro lado, Trump arremetió contra sus principal adversario republicano, el gobernador de Florida, Ron DeSantis, ya que considera que le ha traicionado al presentarse a las primarias y aseguró que él mismo fue el artífice de que ganara la nominación de su partido para la gobernación de ese estado.
DeSantis "no me gusta porque hice que lo eligieran (...), él vino a mí porque necesitaba ayuda", subrayó el expresidente.
Consideró que DeSantis se ha equivocado al postularse ahora a las primarias presidenciales y que debería haber esperado hasta 2028, además de lanzarle un dardo: "Se necesita una cierta personalidad", en alusión a las críticas a su oponente sobre su falta de carácter y dotes en las interacciones de tú a tú.
Por lo demás, Trump hizo un recorrido por los lugares comunes en sus discursos, como las medidas que dice que adoptará contra los tratamientos de afirmación de género y contra los transexuales, así como contra los migrantes, a los que retrató como delincuentes, entre otros.
Todo ello lo hizo sudando la gota gorda literalmente por la alta temperatura que había en la sala, "110 grados" Fahrenheit (43 grados Celsius), aseguró el exmandatario con la frente empapada en sudor, lo que aprovechó para burlarse de los medios de comunicación, que auguró que dirán de él que "no se le veía bien".