Phoenix, Arizona.- La próxima elección presidencial de Estados Unidos está a tres años de distancia, pero Turning Point USA ya sabe que quiere al vicepresidente JD Vance como el candidato republicano.
Erika Kirk, líder de la poderosa organización juvenil conservadora, le otorgó su respaldo en la noche de apertura de la convención anual AmericaFest, en medio de una ovación de la multitud.
Sin embargo, el evento de cuatro días reveló más peligros que promesas para Vance o cualquier otro posible sucesor del presidente Donald Trump, y las tensiones exhibidas presagian las aguas traicioneras que deberán navegar en los próximos años. El movimiento MAGA (“Devolver la Grandeza a Estados Unidos”) se está fracturando a medida que los republicanos comienzan a considerar un futuro sin Trump, y no hay un camino claro para mantener su coalición unida mientras diferentes facciones compiten en busca de influencia. Erika Kirk, quien asumió como líder de Turning Point cuando su esposo Charlie Kirk fue asesinado, dijo el jueves que el grupo quería que Vance fuera “elegido como el 48 de la manera más contundente posible”. El próximo presidente será el 48vo en la historia de Estados Unidos.
Turning Point es una fuerza importante en la derecha, con una red nacional de voluntarios que puede ser especialmente útil en los primeros estados de las primarias, cuando los candidatos dependen de la energía de base para ganar impulso. En una aparición sorpresa, la rapera Nicki Minaj habló efusivamente sobre Trump y Vance.
El respaldo tuvo “al menos un poco de peso” para Kiara Wagner, de 20 años, quien viajó desde Toms River, Nueva Jersey, para la conferencia.