Ucrania dice que ha hundido o inutilizado un tercio de armada rusa en el mar Negro

Confrontación naval entre Ucrania y Rusia en el mar Negro

KIEV (AP) — Ucrania ha hundido o inutilizado a un tercio de las naves de guerra rusas en el mar Negro en poco más de dos años de guerra, dijo un vocero naval el martes, en lo que significa un fuerte golpe a la capacidad bélica rusa.

El vocero Dmytro Pletenchuk dijo a The Associated Press dijo que el ataque más reciente, el sábado por la noche, alcanzó a la nave anfibia de desembarco Kostiantyn Olshansky, que se encontraba en el muelle en Sebastopol, en la Crimea ocupada por Rusia. La nave pertenecía a la marina ucraniana antes de que Rusia la capturara durante la anexión de la península en el mar Negro en 2014.

Pletenchuk anunció previamente que otros dos buques de desembarco del mismo tipo, el Azov y el Yamal, sufrieron daños en el ataque del sábado junto con la nave espía Ivan Khurs.

Dijo a la AP que el ataque el fin de semana, realizado con misiles Neptuno de fabricación ucraniana, alcanzó instalaciones del puerto de Sebastopol y un depósito de petróleo.

Las autoridades rusas informaron de un gran ataque ucraniano Sebastopol el fin de semana, pero no reconocieron daños a la flota.

Pletenchuk dijo que con este último ataque, un tercio de la flota rusa en el mar Negro ha sido destruida o inutilizada. Las autoridades en Moscú no han hecho declaraciones, pero las pérdidas navales anteriores han sido confirmadas por blogueros militares y la prensa.

Al mismo tiempo, Pletenchuk reconoció que solo dos de una docena de naves misilísticas rusas han sido hundidas y prometió que Ucrania seguirá atacando.

"Nuestro objetivo final es la ausencia total de buques militares de la llamada Federación Rusa en las regiones de los mares de Azov y Negro", dijo Pletenchuk a la AP.

Los ataques con drones y misiles han significado un gran impulso a la moral de Kiev cuando sus fuerzas, superadas en número y armamento, enfrentan ataques rusos en el frente de 1.000 kilómetros (600 millas).

El desafío a la superioridad naval rusa ha permitido crear mejores condiciones para la exportación de granos y otros productos desde los puertos del mar Negro.