KIEV, Ucrania (AP) — El defensor ucraniano de Derechos Humanos instó el domingo a organizaciones internacionales a responder a las afirmaciones de que varios prisioneros de guerra ucranianos fueron ejecutados en la región rusa de Kursk, donde Kiev emprendió una incursión en agosto.
DeepState, un sitio web de análisis de la situación en el campo de batalla próximo al Ministerio de Defensa de Ucrania, dijo que las tropas rusas habían matado a tiros a nueve "contratistas y operadores de drones" ucranianos el 10 de octubre después de que se rindieran.
Dmytro Lubinets dijo en Telegram que ya envió cartas a Naciones Unidas y al Comité Internacional de la Cruz Roja en relación con las acusaciones, que describió como "otro crimen cometido por los rusos".
Más tarde el domingo, el procurador general de Ucrania, Andriy Kostin, dijo que su oficina había abierto una investigación sobre el asunto.
La fiscalía general ucraniana dijo este mes que las tropas rusas habían matado a 16 soldados ucranianos capturados en la región parcialmente ocupada de Donetsk.
Las autoridades rusas no respondieron a las acusaciones en un primer momento.
Por su parte, la Fuerza Aérea ucraniana dijo el domingo que sus defensas antiaéreas habían derribado durante la noche 31 de 68 drones lanzados por Rusia contra Ucrania en las regiones de Kiev, Poltava, Chernígov, Sumy y Cherkasy. Otros 36 drones se habían "perdido" en otras zonas, señaló, probablemente tras ser interceptados de forma electrónica.
Misiles balísticos golpearon Odesa y Poltava, mientras que Chernígov y Sumy fueron atacados por un misil aéreo guiado, según la Fuerza Aérea. Las autoridades locales no reportaron daños ni heridos.
El presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskyy, dijo el domingo que Rusia había lanzado unas 900 bombas aéreas guiadas, más de 40 misiles y 400 drones contra Ucrania en la última semana.
Zelenskyy pidió en la red social X que los aliados de Ucrania "proporcionen la cantidad y calidad necesaria de sistemas de defensa antiaérea". Kiev sigue esperando respuesta de sus socios occidentales a sus reiteradas peticiones de que le permitan utilizar las armas de larga distancia que proporcionan para atacar objetivos en suelo ruso.
En Rusia, el Ministerio de Defensa dijo que se habían derribado 13 drones ucranianos sobre tres regiones rusas: seis en Belgorod, otros tantos en Kursk y uno en Bryansk, todas ellas limítrofes con Ucrania.