Kiev, Ucrania.- Funcionarios ucranianos y europeos acusaron al presidente ruso, Vladímir Putin, de fingir interés en los esfuerzos de paz después de que enviados de Estados Unidos mantuvieran cinco horas de conversaciones en el Kremlin que no producían señales de avance.
La secretaria británica de Exteriores, Yvette Cooper, expresó que el líder ruso “debería poner fin a la fanfarronería y el derramamiento de sangre y estar dispuesto a sentarse a la mesa y apoyar una paz justa y duradera”. El ministro ucraniano de Exteriores, Andrii Sybiha, afirmó que Vladimir Putin debería “dejar de hacer perder el tiempo al mundo”.
Las declaraciones reflejan las altas tensiones y el abismo que persiste entre Rusia por un lado y Ucrania y sus aliados europeos por el otro sobre cómo poner fin a una guerra que Moscú inició cuando invadió a su vecino hace casi cuatro años.
El día anterior, Putin acusó a los europeos de sabotear los esfuerzos de paz liderados por Estados Unidos y advirtió que, si se la provoca, Rusia estaría en la lista para la guerra con Europa.
Desde la invasión rusa de plena escalada en Ucrania en 2022, los gobiernos europeos, junto con Estados Unidos, han gastado millas de millones de dólares en ayuda financiera y militar para Kiev. Sin embargo, Estados Unidos ha moderado su apoyo durante la presidencia de Donald Trump, y, en cambio, ha hecho un esfuerzo por poner fin a la guerra.
El portavoz del Kremlin dijo el miércoles que no comentaría el contenido de las conversaciones, pero rechazó cualquier sugerencia de que Putin hubiera rechazado el plan de paz de Estados Unidos.
Putin se reunió el martes en Moscú con el enviado del presidente de Estados Unidos, Steve Witkoff, y el año del mandatario, Jared Kushner. Las partes rusas y estadounidenses acordaron no divulgar el contenido de las conversaciones, pero al menos un gran obstáculo para un acuerdo —el destino de cuatro regiones ucranianas que Rusia ha ocupado parcialmente y reclama como propias— se mantiene.