En Chicomuselo, municipio colindante con Frontera Comalapa, se denunció que miembros de la organización MAIZ, ligada al Cártel Jalisco, mantienen retenes en los accesos a la cabecera municipal, de unos 25 mil habitantes.
En la delegación de Gobierno de ese lugar, habitantes fueron a colocar cartulinas para pedir que "No queremos que Chicomuselo se convierta en otro Comalapa".
Mientras que maestros de que laboran en comunidades de la Sierra, pidieron a las autoridades de la Secretaría de Educación, "dicen medidas para garantizar la vida, la seguridad y la integridad de los trabajadores de la educación en las comunidades y municipios de alto riesgo de violencia".
Conflicto entre cárteles
No es la primera vez que comunidades de las regiones Fronteriza y Sierra viven un conflicto entre dos cárteles. La primera ocurrió entre el 2006-2017, cuando el Cártel de Sinaloa mantuvo una lucha contra Los Zetas que intentaron tomar el control de las comunidades de México y Guatemala, como parte de una estrategia para el tráfico de drogas, guerra que dejó decenas de personas sin vida y varios desaparecidos.
Un hecho que provocó pánico entre los habitantes de Frontera Comalapa, ocurrió el 15 de julio del 2009, cuando se registró un cruento enfrentamiento entre Los Zetas contra el Ejército y la Policía, donde perdió la vida Dulce Vázquez López, de 15 años, al ser alcanzada por una bala, pero también murió un agente de la Policía Estatal y varios más resultaron heridos.
En enero del 2017, Los Zetas atacaron a miembros de la organización Los Huistas, entonces socios del Cártel de Sinaloa, (hoy que han roto relaciones) en la comunidad Agua Zarca, en Santa Anta Huista, Guatemala, donde se desarrollaban carreteras de caballos y habían asistido personas de México y Guatemala, hecho que dejó 17 personas muertas, varios heridos y detenidos.
El 27 de diciembre del 2022, con la muerte en una emboscada de José Fernando Cruz Montejo, alias "El Pony" y sus guardaespaldas Julio César Rodas Díaz, José Luis García López y Ammer Ruiz Guillén, de 26, 26 y 28 años de edad, el Cártel de Sinaloa se quedó sin sus aliados guatemaltecos en la lucha que libra contra el Cártel Jalisco Nueva Generación, que busca apoderarse las rutas que van desde la frontera de Guatemala, para traficar estupefacientes, armas y personas.
Ante la confrontación que se libra en la Sierra Madre de Chiapas, la diócesis de Tapachula declaró que "en estos momentos de sufrimiento y escasez, usemos nuestra inteligencia, con tranquilidad, para sobrevivir con lo que esté a nuestro alcance para ir viviendo día a día".