QUITO, Ecuador (AP) — La delegación diplomática de México abandonó el domingo Ecuador tras la crisis que se desató por la irrupción de policías a su embajada para detener a un ex vicepresidente ecuatoriano que había recibido asilo político, lo que desecadenó una ruptura de relaciones entre los dos países latinoamericanos y la condena de varios gobiernos extranjeros.
La misión encabezada por la embajadora, Raquel Serur, partió la mañana del domingo en el vuelo comercial 685 de la aerolínea Aeroméxico con destino hacia la Ciudad de México, confirmó a The Associated Press la Cancillería de México.
Dentro de la delegación de 18 personas, que incluye a diplomáticos y sus familiares, va Roberto Canseco, jefe de la sección consular mexicana en Quito, quien fue el que se enfrentó la noche del viernes a los policías cuando entraron por la fuerza a la sede diplomática para detener al ex vicepresidente Jorge Glas, que residía allí desde diciembre. Había pedido asilo tras ser acusado de cargos de corrupción, una protección que había obtenido unas horas antes.
La embajada de México en Quito permanecerá cerrada indefinidamente y se activarán desde las sedes en Colombia y Chile los servicios consulares para 1.600 ciudadanos mexicanos y empresario radicados en Ecuador, informó la Cancillería.
Tras el incidente el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, rompió relaciones diplomáticas con Ecuador, mientras que la secretaria mexicana de Exteriores dijo que llevaría el suceso ante la Corte Internacional de Justicia en La Haya.
La acción del gobierno del ecuatoriano Daniel Noboa desató una amplia condena de varios líderes internacionales.
La Organización de Estados Americanos (OEA) recordó en un comunicado a sus miembros, que incluyen a Ecuador y México, de su obligación de "no invocar normas de derecho interno para justificar el incumplimiento de sus obligaciones internacionales".
Por su parte, el Ministerio de Exteriores español indicó en un comunicado el domingo que "la entrada por la fuerza en la Embajada de México en Quito supone una violación de la Convención de Viena sobre relaciones diplomáticas de 1961", posición que también fue respaldada por Josep Borrell, alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad.
El vocero del Departamento de Estado de Estados Unidos, Matthew Miller, dijo que "Estados Unidos condena cualquier violación de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas y se toma muy en serio la obligación de los países anfitriones, según el derecho internacional, de respetar la inviolabilidad de las delegaciones diplomáticas". Pidió que los dos países resolvieran sus diferencias.
Los recintos diplomáticos están considerados como territorio extranjero, son "inviolables" según los tratados de Viena y las fuerzas de seguridad del país anfitrión no están autorizadas a entrar sin permiso del embajador. Personas que han buscado asilo han vivido días y hasta años en embajadas de todo el mundo, incluida la de Ecuador en Londres, que albergó al fundador de WikiLeaks, Julian Assange, durante siete años sin que la policía británica pudiera ingresar para arrestarlo.
GLAS ES LLEVADO A PRISIÓN
Glas fue trasladado el sábado de la oficina del fiscal general en Quito a la ciudad portuaria de Guayaquil, donde permanecerá retenido en una prisión de máxima seguridad. Gente reunida ante la fiscalía exclamaba "¡fuerza!" cuando el exfuncionario salía en un convoy de vehículos policiales y militares.
La abogada de Glas, Sonia Vera, relató a la AP que los policías irrumpieron en su habitación, pusieron sus manos hacia atrás, ante lo que Glas se resistió y "lo tumbaron al piso, le patearon en la cabeza, en la columna, en las piernas, las manos" y al no poder caminar, "a rastras lo sacaron".
A la defensa no se le permitió ver a Glas mientras se encontraba en la oficina del fiscal, por lo que prepara un pedio de habeas corpus, agregó.
Las autoridades investigan a Glas por supuestas irregularidades durante su manejo de las tareas de reconstrucción tras un potente sismo en 2016 que mató a cientos de personas. Ha sido condenado por sobornos y cargos de corrupción en otros casos.
La ministra ecuatoriana de Exteriores, Gabriela Sommerfeld, dijo el sábado a periodistas que la decisión de ingreso a la sede diplomática mexicana fue adoptada por el presidente de Ecuador, ante "un riesgo de fuga inminente" de Glas y tras haber agotado, según aseguró, todas las posibilidades de diálogo diplomático con México.
La especialista en derecho internacional y directora del Observatorio de Derecho y Justicia, María Dolores Miño, advirtió que Ecuador deberá afrontar sanciones inmediatas de carácter político que "no se deben subestimar".
Miño advirtió que Glas podría demandar al país ante el sistema interamericano de Derechos Humanos. "El hecho que se le haya arrebatado forzosamente las protecciones de ese estatus, por más que no estemos de acuerdo con esto, es una clara violación a derechos protegidos", acotó.
EL PRESIDENTE DE ECUADOR OPTA A LA REELECCIÓN EL AÑO QUE VIENE
Noboa se convirtió en presidente de Ecuador el año pasado mientras el país enfrentaba unas tasas de delincuencia récord vinculadas al narcotráfico. Declaró que el país está en un "conflicto armado interno" en enero y designó a 20 organizaciones de narcotráfico como grupos terroristas que el ejército tenía autorización de "neutralizar" dentro de los márgenes del derecho humanitario internacional.
Will Freeman, experto en América Latina en el Consejo de Relaciones Exteriores, un centro de estudios con sede en Estados Unidos, dijo que la decisión de enviar a la policía a la embajada mexicana plantea preocupaciones sobre las medidas que Noboa está dispuesto a tomar para ser reelegido. Su mandato termina en 2025 porque fue elegido para completar el mandato del expresidente Guillermo Lasso.
"De verdad espero que Noboa no esté tomando un rumbo más como el de Bukele", dijo Freeman en alusión al presidente de El Salvador, Nayib Bukele, cuya estrategia de mano dura contra la delincuencia ha sido muy criticada por organizaciones de derechos humanos. "Es decir, menos respetuoso con el estado de Derecho para conseguir un impulso en su popularidad antes de las elecciones".