CIUDAD DE MÉXICO, junio 26 (EL UNIVERSAL).- Jueces, magistrados del Primer Circuito y trabajadores del Poder Judicial de la Federación (PJF) manifestaron que no están cerrados al cambio para mejorar el servicio público, pero tampoco están dispuestos a ser destruidos, esto luego del planteamiento de la iniciativa de reforma constitucional al Poder Judicial.
El magistrado Rogelio Alanís García, del Cuarto Tribunal Colegiado en Materia Penal del Primer Circuito, llamó a la unidad para defender la carrera judicial y enfatizó que no están negados al cambio, por el contrario, pretenden que mejore.
"Tampoco estamos dispuestos a la destrucción... somos un Poder del Estado de la República que es esencial para ella, un Poder que se debe al trabajo, al sacrificio y al mérito, nadie aquí ha recibido algo de manera regalada", argumentó ante cientos de trabajadores en la explanada de los Tribunales Colegiados Penales en Avenida Revolución, al Sur de la Ciudad de México.
Alanís advirtió que con una reforma destructiva del Poder Judicial, no habrá con quién ir a hablar y hacer valer la ley ni la Constitución.
Además, no se tendrán condiciones de trabajo que defender, no habrá ante quién ir a hacer valer su voz, no se contará con un tribunal que escuche a la gente.
"La reforma es mucho más amplia, no solamente para la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) también implica al Consejo de la Judicatura de la Federación (CJF) a todos los jueces y magistrados federales", resaltó.
Señaló que el Estado está hecho para servir a la gente y requiere delegar funciones a varias instituciones, la que corresponde al PJF es resolver los conflictos de manera civilizada con base en los valores que están en la Constitución.
"El país requiere de personas profesionales y no es una cuestión de cargos, es defender que existan los contrapesos", expresó.
Subrayó que este momento los obliga a salir de su zona de confort, "lo digo entre comillas, es una zona de confort de 15 a 16 horas al día de trabajo... Tenemos que salir para que nos escuche la gente y llamar a la unidad porque todo el PJF es uno".
En su intervención el magistrado Reynaldo Manuel Reyes Rosas, del Décimo Tribunal Colegiado en Materia Penal, comentó que han pretendido denostar al PJF y es momento de alzar la voz para ser escuchados por quienes no conocen el trabajo especializado que desarrollan para garantizar el Estado de derecho.
"Somos los que defendemos los derechos humanos, siempre tendremos la obligación constitucional de unificar los actos que sean contrarios a la Constitución y a los derechos humanos", aseveró Reyes Rosas.
El magistrado dijo que deben buscar a la virtual presidenta electa, Claudia Sheinbaum Pardo, para entablar el diálogo, ya que teniendo ellos (Morena) la mayoría, no significa que tengan razón.
Sostuvo que la mayoría debe legitimarse a través de un acercamiento con la clase trabajadora, no tan solo del Poder Judicial, también con otros ámbitos y que los escuchen para que tomen las decisiones acertadas.
"Desde luego que vamos a buscarla... el problema es que se abran las puertas, sobre todo que haya una oreja sensible que nos escuche, no que nos oiga, que nos escuche y entablar diálogo", refirió.
Reyes destacó que la problemática de la justicia en el país parte desde la investigación que viola sistemáticamente los derechos humanos.
Los trabajadores del Poder Judicial de la Federación colocaron una lona donde precisan que las personas juzgadoras deben emanar de un servicio profesional de carrera ya que la función es técnica-jurídica no política.
"¿Te generaría confianza saber que un juzgador fue apoyado en campaña por tu contraparte en un juicio? En campaña prometes a tus electores, te apoyan para que le cumplas tus compromisos adquiridos.
"La justicia no puede partir de una promesa de campaña, sino en función de los derechos que se tutelan en cada caso concreto", se lee en la manta.
Indica que la independencia judicial es un derecho de todas las personas de que sus juicios sean resueltos conforme a derecho.