Los policías confirmaron el hallazgo e informaron al agente del Ministerio Público, quien con apoyo de elementos de la Policía de Investigación, procedieron a inspeccionar el vehículo.
Al revisar con mayor detalle el exterior de la camioneta, notaron que en una de las manijas para abrir las puertas había unos cables sueltos, por lo que se solicitó la presencia del Grupo Especializado en Explosivos (TEDAX). Los especialistas descartaron la presencia de artefactos explosivos y finalmente los agentes abrieron el auto, en cuyo interior había cinco hombres muertos.
Peritos del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses se presentaron para llevar a cabo la fijación y recolección de indicios, en tanto que los cuerpos fueron llevados a los descansos del Servicio Médico Forense para la práctica de la necropsia, que permitirá establecer las causas de su deceso y en espera de que sean identificados de forma oficial.