CIUDAD DE MÉXICO, julio 29 (EL UNIVERSAL).- El ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) Jorge Mario Pardo Rebolledo señaló que la garantía para recibir una justicia profesional e imparcial deriva de la independencia judicial, con motivo de la iniciativa de reforma al Poder Judicial de la Federación.
Afirmó que no es un privilegio o facultad de los juzgadores, sino una garantía para todo ciudadano que se acerca a los tribunales.
En un comunicado, la SCJN retomó la entrevista al ministro que ofreció a Justicia TV el 2 de mayo en Toluca, en el marco del Encuentro Nacional para una Agenda de Seguridad y Justicia, donde manifestó que la independencia judicial es uno de los valores fundamentales del desempeño de los juzgadores.
Detalló que se ha dado un enfoque que no es el adecuado, porque se visualiza la independencia judicial como un privilegio o una facultad de los juzgadores.
Pardo Rebolledo destacó que se trata de una garantía para quienes se acercan a los tribunales de que la persona que va a resolver lo hará con absoluta independencia, imparcialidad y profesionalismo.
Indicó que las críticas o posibles ataques a la independencia judicial es algo que tienen previsto los juzgadores de carrera; sin embargo, explicó que se debe tomar en cuenta que la labor del juzgador siempre se da en medio de un conflicto de derechos, así como un conflicto de intereses: cuando el juez resuelve, no puede declarar empates, tiene que darle la razón a uno y la contraparte, naturalmente, queda insatisfecha.
El también presidente de la Primera Sala de la Suprema Corte reconoció que se debe cerrar la brecha entre la sociedad y los órganos de justicia, se requiere comunicar mejor la labor y que se conozca que se cuenta con un cuerpo de juzgadoras y juzgadores preparados, profesionales, actualizados y con el compromiso de llevar a cabo su función que, en esencia, es la defensa de los derechos de las personas.
Comentó que el año pasado se registraron cerca de un millón 300 mil amparos en los órganos jurisdiccionales a nivel federal, es una muestra de que sigue existiendo confianza en acudir a un tribunal para la solución de controversias o cuando se estima que algún acto de autoridad viola los derechos de particulares.
El ministro se pronunció a favor de que la Corte esté integrada por personas que vengan de la carrera judicial, con trayectoria y experiencia de ser jueces constitucionales; sin embargo, enfatizó que hay perfiles excelentes en todos los ámbitos del derecho.
Por otra parte, la ministra Loretta Ortiz remarcó que el perfil de las personas que serán propuestas y posteriormente electas para integrar el Poder Judicial deben ser de un perfil alto derivado en sus méritos, estudios, profesionalización y carrera judicial.
El 25 de julio, al conceder una entrevista para la plataforma Foro Jurídico, la ministra comentó que, para ser una persona juzgadora o ministra se necesita experiencia y especialidades que podrían garantizarse en los exámenes y concursos de la Escuela Judicial, pues se requieren conocimientos para dictar sentencias. En esa ocasión, llamó a crear un nuevo modelo de justicia, con un sistema de investigación ministerial de fiscalías más efectivo en temas como desaparición, trata, crimen organizado y secuestro.
Dijo que se podría recurrir a la inteligencia artificial para integrar las carpetas de investigación y se pronunció a favor de dividir las actividades del tribunal constitucional y del Consejo de la Judicatura.