Salina Cruz, Oax.- Después de los atrasos porque la licitación se declaró desierta, y de protestas de pescadores, productores de sal, transportistas y dueños de los bancos de rocas inconformes, este lunes el presidente Andrés Manuel López Obrador inaugurará la escollera oeste o rompeolas de Salina Cruz, que debió estar lista a finales de 2022, y que representó una inversión federal de 4 mil 147 millones de pesos.
En la versión oficial, la terminación de esa obra de ingeniería marítima, que requirió 11 millones de toneladas de rocas sembradas en aguas del Pacífico frente a la localidad de Salinas del Marqués, permitirá el arribo de grandes buques mercantes con miles de contenedores, para ser trasladados a bordo del Tren Transístmico, con destino a la costa este de Estados Unidos.
“El 26 inauguro el rompeolas de Salina Cruz, que va a permitir que lleguen barcos enormes, de los más grandes. Se dio la concesión para la operación del puerto, está rehabilitado Coatzacoalcos. Ya están los dos puertos. Se está haciendo siete horas de Salina Cruz a Coatzacoalcos”, expuso en su momento AMLO.
Sin embargo, autoridades y especialistas coinciden en que falta una inversión millonaria y varios años más de obras para que todo eso se concrete.
“Creo que debemos ser prudentes con las expectativas”, afirma el agente naviero Mario Ramón Cisneros, quien advierte que no basta con un rompeolas para atraer a los enormes buques que presume el presidente López Obrador. “Por sí sola, la escollera oeste no tiene ningún atractivo para que lleguen a Salina Cruz los barcos conocidos como Post Panamax, que miden más de 300 metros de largo [eslora] y cargan 15 mil contenedores”, explica.
Según el Programa Operativo de la ASIPONA de Salina Cruz, tras la inauguración de la escollera oeste vendrá la segunda etapa para avanzar en la consolidación de las operaciones mercantes, mediante la carga contenerizada y a granel, y para ello se requieren al menos 14 mil millones de pesos para continuar con las obras. Tres veces más del costo del rompeolas.