CIUDAD DE MÉXICO, diciembre 7 (EL UNIVERSAL).- Durante la audiencia de continuación de Juan Carlos García Rivera acusado por su probable responsabilidad en el delito de intervención ilegal de comunicaciones con el software Pegasus, en perjuicio de la periodista Carmen Aristegui, con la causa penal 370/2021, el perito ingeniero en electrónica, Guillermo Zavala Montaño, quien participó como testigo, manifestó que no hay un registro de cadena de custodia desde el 2014, del celular que fue intervenido.
La audiencia en el Centro de Justicia Federal del Reclusorio Sur, estaba programada para las 9:30 horas, pero inició a las 11:51 horas y concluyó a las 15:30 horas. El retraso se debió por atender una audiencia urgente.
Sismo no permite participar a 3 testigos en caso Pegasus
Ante el juez de control, Luis Benítez, los agentes de la Fiscalía General de la República (FG) le informaron que tenían contemplado la participación de 4 testigos, pero el sismo registrado a las 14:03 horas ocasionó que los presentes abandonaran la sala por espacio de 10 minutos y sólo dio oportunidad para un testigo.
Uno de los fiscales, Pedro Zarate, cuestionó al testigo sobre tres dictámenes que efectuó con los folios 9972, 30150 y 11795 relacionados con Pegasus donde algunos se efectuaron en la Unidad de Investigaciones Cibernéticas y Operaciones Tecnológicas (UICOT) de la Fiscalía, el perito señaló que se encontraba el sistema de Pegasus con cuatro gabinetes y probablemente 74 discos duros. También expresó que revisó un celular (probablemente de Aristegui), y una perito le tomó fotos a los mensajes para analizarlo.
Al concluir la audiencia, Cuauhtémoc Vázquez, abogado del hoy detenido, dijo que quedó claro que no hay un registro de cadena de custodia desde el 2014, cuando inician los supuestos mensajes de infección al celular.
"El Teléfono viaja a Canadá, luego a Estados Unidos... es hasta el 2022, donde se empieza la cadena de custodia, de un indicio que empezó la problemática en 2014 y 2015", expresó.
El litigante manifestó que nadie les garantiza que ese teléfono no se manipuló o se contaminó en esos años y el otro tema que quedó establecido fue que el testigo, Zavala Montaño, no conoce al imputado.
"No conoce a nuestro defenso, a García Rivera, mi cliente no cometió este posible hecho por el cual lleva más de dos años aquí", refirió.
El abogado comentó que este viernes continúa la audiencia donde se contempla la asistencia de más de 12 de testigos, que en la misma tónica van a decir su parte técnica.
Testigos no conocen a imputado en caso Pegasus
"Van a decir lo que vieron lo que les consta, pero ninguno de ellos va a poder establecer que conocen a García Rivera. Entonces ¿porque está aquí mi cliente? Eso es lo que nos preguntamos todos.
"Para que mi cliente esté privado de libertad, tiene que haber una imputación directa de alguien y pruebas que lo relacionen con el hecho delictivo que es la intervención del aparato telefónico a la periodista, no lo hay", aseveró.
El lunes pasado durante la primera audiencia, un testigo protegido identificado como "Zeus", por parte de la FGR, expresó que el expresidente Enrique Peña Nieto ordenó el uso de este programa, para espiar a empresarios como Carlos Slim, Germán Larrea y periodistas.
Ante el juez el testigo dijo que el exmandatario señalaba a las personas que eran de interés para dar seguimiento a sus actividades, mensajes y llamadas telefónicas.
Entre los periodistas, además de Aristegui se encuentran: Carlos Loret de Mola, Pedro Ferriz de Con, Genaro Villamil, Héctor de Mauleón.
Así como los empresarios Emilio Azcárraga, presidente de Grupo Televisa, el directivo de Grupo México, Germán Larrea, y al empresario Carlos Slim.
En la audiencia, "Zeus" refirió que mil 500 personas fueron objeto de espionaje, y que tanto Peña Nieto como el exdirector del Centro de Investigación y Seguridad Nacional, Eugenio Imaz, conversaban con el dueño de la empresa, el israelí Uri Emmanuel Ansbacher Bendrama, para instruir a quién tenían que vigilar.
García Rivera fue detenido por la Policía Ministerial, en noviembre de 2021, en Querétaro y trasladado al Reclusorio Sur.