CIUDAD DE MÉXICO.- La población debe estar consciente de que la lepra no se ha erradicado del país, donde hay casos en 28 estados, dijo la académica del Departamento de Microbiología y Parasitología de la Facultad de Medicina de la UNAM, María del Rosario Morales Espinosa, quien indicó que debe prepararse a los médicos para que, a partir del primer nivel de atención, identifiquen esa enfermedad.
Aseguró que la lepra es una enfermedad infecciosa y curable, que, con detección y atención adecuada, puede evitarse que el paciente tenga lesiones deformantes o discapacitantes.
“Es posible prevenir a través de vigilar los contactos de los pacientes. Una persona puede tener miles en cierto tiempo y por ello son necesarios los estudios epidemiológicos: localizar al enfermo, saber qué lugares y a quién visitó, y orientarlos respecto a qué deben hacer si presentan cualquier tipo de lesión, a fin de descartar que sea producto del contagio de la lepra”, explicó.
En un comunicado, recordó que el año pasado la Secretaría de Salud emitió una alerta en el país, pues al cierre de 2022 registró 618 casos en vigilancia postratamiento y 300 en tratamiento, en 28 estados de la República mexicana.
En siete de ellos, Jalisco, Michoacán, Morelos, Nuevo León, Oaxaca, Sinaloa y Yucatán, hubo municipios con una tasa de prevalencia mayor a un caso por cada 10 mil habitantes.
Morales Espinosa afirmó que son menores a los que se detectaron en décadas anteriores, pero lo que aumentó fue su prevalencia, indicativo de que la enfermedad tiende al alza.
Los síntomas de la enfermedad de la lepra pueden presentarse hasta 20 años después.
Otro problema, refirió, es que durante la emergencia sanitaria por la Covid-19 la lepra fue una de las numerosas enfermedades “que se olvidaron”.