El presidente Andrés Manuel López Obrador acusó que la sentencia de liberación de 80 personas, que confesaron haber participado en la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, tuvo que ser aprobada en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) porque no fue asunto de un juez o un magistrado.
"Cuando sale esta resolución la celebran los defensores de derechos humanos, dejaron en libertad a responsables, lo puedo probar, esos que liberaron luego son testigos protegidos y confiesan que si habían participado.
"Eso no lo sabían los padres, y esto es lo que quieren que no lo diga, pero ya parece que me voy a callar, quiero saber de parte de quien se recibió la orden de elaborar esa sentencia, porque para aventarse una sentencia así, no es un asunto de un juez o un magistrado, esto lo tuvieron que haber aprobado arriba, en la Corte, ¿quién dio la instrucción y por qué?".
En conferencia de prensa, el titular del Ejecutivo dijo que se volverá a reunir con los padres de los estudiantes desaparecidos en Iguala, Guerrero en septiembre de 2014, cuando tengan información sobre el avance de la investigación.
Aseguró que están abiertos los archivos de la Secretaría de la Defensa Nacional para que los padres y sus abogados los consulten, pero solo por tres meses porque "no quiero que siga pasando el tiempo, ya me falta poco y quiero entregar buenos resultados".
Reprochó que hay gente que no le dan confianza, "no son los padres", sino de las supuestas organizaciones no gubernamentales y defensores de los derechos humanos que tienen intereses políticos y ligas con el bloque conservador, organizaciones internacionales y gobiernos extranjeros.