Ciudad de México.- La logística, comprendida como la transportación entre la distancia del lugar de producción y el punto de venta, es el elemento que más influye en el aumento del precio de la gasolina, indica la consultora Caraiva y Asociados con datos de la Comisión Reguladora de Energía.
En 2017, cuando la gasolina estaba en 15.99 pesos por litro, la logística determinaba 13% del precio al público, pero ahora que el combustible se vende en casi 25 tiene una participación de hasta 42%.
Esto se debe a que México sigue importando 58% de las gasolinas desde Estados Unidos, en gran medida por autotransporte o ferrocarril, ya que no ha ampliado las redes de ductos ni almacenamiento.
En segundo lugar, aparece el margen de ganancia que las empresas buscan obtener, el cual pasa directamente factura a los bolsillos de los consumidores.
Desde que comenzó la gestión del presidente Andrés Manuel López Obrador, la Profeco aplica un monitoreo de los precios de las gasolinas.
La entidad que hoy dirige David Aguilar Romero identificó a Repsol, Orsan y Total como las franquicias con los mejores precios y menores indicadores de ganancia.
Orsan destaca por ser la única mexicana y que ha bajado el precio de la premium, que es la que recibe el menor apoyo del gobierno y la que más se trae de Estados Unidos.
Grupo Orsan es una empresa que se fundó en San Nicolás, Nuevo León en 1968 con la visión de ofrecer venta y distribución de combustibles y posee más de 100 mil clientes diariamente, con 2 mil 900 colaboradores y 43 estaciones de servicio, de acuerdo con la agencia Petrointeligence.