Ciudad de México.- Para conmemorar el recorrido que Francisco I. Madero realizó del Castillo de Chapultepec a Palacio Nacional escoltado por cadetes del Heroico Colegio Militar, hace 112 años, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo encabezó ayer —por primera vez en su gobierno— la Marcha de la Lealtad, con la ausencia del Poder Judicial de la Federación.
En un ambiente caluroso y con la curiosidad de corredores y ciclistas del Bosque de Chapultepec que esperaban a lo lejos el paso de la también comandanta suprema de las Fuerzas Armadas, Sheinbaum Pardo hizo el recorrido hasta el Castillo acompañada del secretario de la Defensa, general Ricardo Trevilla Trejo, y el almirante Raymundo Pedro Morales, secretario de Marina.
Elementos a caballo los escoltaban mientras una cadena de jóvenes cadetes rendía honores al paso del vehículo militar.
En otro auto descubierto, la Titular del Ejecutivo federal fue seguida por la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez; el canciller Juan Ramón de la Fuente y el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch.
Con vestido verde y chongo, Sheinbaum Pardo escuchó un grito de entre los asistentes alumnos de secundarias invitados al evento: “¡Claudia, te amo!”.
Los uniformes verde olivo y azul marino de los integrantes del Colegio Militar y del Colegio del Aire lucían perfectos con el calzado bien boleado en la primera Marcha de la Lealtad encabezada por una mujer. Con un saludo a la escolta de bandera y la entonación del Himno Nacional Mexicano, la Mandataria pasó lista de honor a los héroes de las gestas heroicas de 1845 y 1914, “los Niños Héroes” del Heroico Colegio Militar: teniente Juan de la Barrera, cadete Juan Escutia, cadete Agustín Melgar, cadete Vicente Suárez, cadete Fernando Montes de Oca y cadete Francisco Márquez.
El general Ricardo Trevilla Trejo fue claro en su mensaje a la comandanta suprema ante los recientes amagos del presidente estadounidense Donald Trump: “Nuestra soberanía no es negociable”.
“Doctora Claudia Sheinbaum Pardo, en esta primera ceremonia de la Marcha de la Lealtad que preside usted, le expreso, en nombre de todas y todos los integrantes de las Fuerzas Armadas, que es un orgullo que sea nuestra comandanta suprema, no sólo por ser la primera mujer en ocupar este cargo, sino por su valentía, sensatez y amplio nacionalismo”, declaró.
Con entusiasmo y pasión, dos cadetes declamaron la poesía Entre Leales, seguido del himno del Heroico Colegio Militar. Por primera vez en la historia del Colegio Militar, una compañía integrada por mujeres realizó una salva de fusilería.