CIUDAD DE MÉXICO, febrero 27 (EL UNIVERSAL).- El presidente Andrés Manuel López Obrador acusó que "por sus pantalones" y por estar al servicio de grupos de intereses creados anularon su reforma eléctrica, pese a que ésta, destacó, ya había sido aprobada por el Poder Legislativo.
En Tamazunchale, San Luis Potosí, al encabezar la ceremonia de nacionalización de 13 centrales de energía eléctrica que le compró a la española Iberdrola, el Mandatario federal señaló que los dos ministros del máximo tribunal que tiraron la ley no fueron electos por el pueblo, sino por sus influencias.
Reiteró sus señalamientos al Poder Judicial al manifestar que está del "lado de unos cuantos, de una minoría", por lo que, señaló, no representan al pueblo.
"Quisimos reformar la ley y no se pudo, porque dos ministros de la Suprema Corte, no electos por el pueblo, sino por sus influencias y por estar al servicio de los grupos de intereses creados sin importarles que esa ley la había aprobado la Cámara de diputados, senadores y la habíamos propuesto nosotros, dos ministros, por sus pantalones la desconocieron.
"Fíjense cómo está de entregado a una minoría el sector, el Poder Judicial".
Acompañado por el gobernador Ricardo Gallardo Cardona, el presidente López Obrador señaló que envió una iniciativa para que jueces, magistrados y ministros los elija el pueblo y "que no sean designados por las cúpulas del poder económico y del poder político".
El presidente López Obrador solicitó un aplauso al presidente ejecutivo de Iberdrola, José Ignacio Sánchez Galán, al señalar que tuvo mucha voluntad por llegar a este acuerdo de compra de las 13 plantas de Iberdrola al gobierno federal.
"Y, para terminar, pues un aplauso al ingeniero José Ignacio Sánchez Galán que está aquí, porque hubo mucha voluntad de su parte para llegar a este acuerdo, esta es una muestra que con diálogo y buena fe se pueden llegar a buenos acuerdos como este que se está logrando con la compra de las 13 plantas de Iberdrola para el gobierno de México".