El pleno del Senado de la República inició el debate de la denominada supremacía constitucional con la que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) quedará imposibilitada para admitir a trámite y resolver cualquier acción de inconstitucionalidad, controversia constitucional o amparo en contra de una reforma que afecte a ciudadanos, como sería el caso de la reforma judicial.
En sesión nocturna, con un quorum de 110 senadores, la tercera de este jueves, la mayoría de Morena y sus aliados se prevé aprueben la reforma a la Carta Magna impide que el Máximo Tribunal declare inconstitucional la reforma judicial, aprobada por el Congreso de la Unión a principios de octubre.
Se elevan a rango constitucional la improcedencia del amparo contra cambios a la Carta Magna y buscan evitar que reformas constitucionales queden congeladas por controversias o acciones de inconstitucionalidad ante el Poder Judicial de la Federación.
Con las modificaciones para la supremacía constitucional, se precisa en el dictamen, se busca clarificar, "para quienes hoy estiman que una reforma constitucional es impugnable", que el actual sistema constitucional mexicano no contempla esta posibilidad.