CIUDAD DE MÉXICO, 3 de febrero (EL UNIVERSAL) - Elementos del Grupo Beta del Instituto Nacional de Migración (INM) en Piedras Negras, Coahuila, rescataron a 74 migrantes en tres acciones distintas entre el 29 de enero y el 2 de febrero. Los migrantes, originarios de México, Venezuela, Perú, Ecuador, Nicaragua, Guatemala y Honduras, se encontraban en peligro después de quedar varados en las aguas del Río Bravo. Además, se encontraron los cuerpos sin vida de tres hombres flotando en el agua.
El INM informó que en el primer caso, un grupo de 17 personas extranjeras intentaba llegar a Estados Unidos de manera irregular pero no pudieron avanzar debido al frío y las fuertes corrientes. Sin embargo, lograron llegar a un islote cerca del Río Bravo, en el lugar conocido como El Molcajete. "Un reporte del C-4 alertó a los agentes del INM sobre la presencia de gente en el islote, por lo que elementos de Grupo Beta se trasladaron en aerobote al lugar en donde se encontraba un grupo de 17 personas (cinco menores de edad acompañados y 12 adultos)", indicó el INM. Seis de los migrantes rescatados son de Nicaragua, cinco de Guatemala, cuatro de Ecuador y dos de Venezuela. Fueron llevados a la orilla del río en el lado mexicano, donde ya se encontraban rescatistas del Cuerpo de Bomberos y autoridades municipales. Se les proporcionaron sábanas térmicas y, después de verificar que estuvieran en buen estado de salud, fueron trasladados al albergue Casa del Migrante Frontera Digna.
En un segundo suceso, elementos del Grupo Beta respondieron a un llamado de alerta y se trasladaron a los márgenes del Río Bravo, en la colonia Morelos, donde auxiliaron a una mujer adulta de Honduras y a su hijo de un año de edad, quienes se encontraban en peligro dentro del agua. Ambos presentaban signos leves de hipotermia y se les proporcionaron sábanas térmicas. Fueron llevados a la orilla en el lado mexicano y una ambulancia de la Cruz Roja los trasladó al Hospital "Salvador Chavarría" para su evaluación y atención médica.
En un tercer rescate, se encontró a un grupo de 54 migrantes en un islote del Río Bravo, en el lugar conocido como Santo Domingo. Debido a la fuerte corriente y peligrosidad del agua, los agentes Beta del INM convencieron a los migrantes de regresar a territorio mexicano, donde recibieron acompañamiento de elementos de seguridad federal y estatal. El grupo estaba compuesto por 17 menores acompañados y 37 adultos, incluyendo cuatro mexicanos, cinco venezolanos, ocho colombianos, tres peruanos, 11 nicaragüenses, ocho guatemaltecos y 15 hondureños. Los mexicanos fueron llevados al hospital debido a que uno de los menores tenía fiebre, mientras que los extranjeros fueron conducidos a instalaciones migratorias.
Durante el recorrido en aerobote por el Río Bravo, los elementos del Grupo Beta encontraron los cuerpos de tres presuntos migrantes masculinos que no portaban identificación. La Fiscalía del estado se hizo cargo del levantamiento e inició la investigación correspondiente.