Ciudad de México.- Dos agentes de inteligencia de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), que es encabezada por Omar García Harfuch, se encuentran en calidad de no localizados en el estado de Jalisco, donde realizaban labores de investigación de campo.
Los elementos desaparecieron en el municipio de Zapopan, a la altura de la zona de Paseo de los Virreyes, mientras se dirigían a Guadalajara, la capital del estado.
A decir de la SSPC, el vehículo oficial en el que viajaban fue localizado abandonado y se perdió comunicación con ellos.
“Los hechos ocurrieron este martes, cuando los agentes se dirigían hacia la ciudad de Guadalajara a bordo de un vehículo oficial y se perdió comunicación con ellos. Como resultado del seguimiento a la ruta que llevaban, la unidad fue localizada abandonada en la zona de Paseo de los Virreyes, en el municipio de Zapopan”, reportó la SSPC en una comunicación oficial.
La dependencia federal detalló que mantiene comunicación permanente con las autoridades de Jalisco y trabaja de manera coordinada con la Secretaría de la Defensa Nacional (Defensa), la Secretaría de Marina (Semar) y la Guardia Nacional para dar con los elementos desaparecidos.
Además, afirmó que las familias de los agentes “cuentan con el acompañamiento y el respaldo absoluto de la institución”, que ya les está brindando apoyo.
Agentes asesinados
El 18 de diciembre de 2024, en Culiacán, Sinaloa, otro agente de investigación de la SSPC fue acribillado por integrantes del grupo de Los Chapitos, que es una facción del Cártel del Sinaloa.
En ese momento se mencionó a Jesús Alfredo Beltrán Guzmán, alias “El Mochomito”, como autor intelectual del homicidio. El presunto responsable es un sicario y jefe de plaza en Culiacán ligado al grupo delincuencial que lideran los hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán.
También, en julio de 2024 Milton Morales Figueroa, quien era coordinador general de la Unidad de Estrategia, Táctica y Operaciones Especiales de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la Ciudad de México, murió a manos del crimen organizado mientras se encontraba en el municipio de Coacalco, en el Estado de México.