“Debe ser muy grande el placer que
proporciona el gobernar, puesto que
son tantos los que aspiran a hacerlo”.
Voltaire
En mi colaboración anterior describí de manera general las funciones de un Gobernador.
Mencioné que para este cargo se ocupa mucha sensibilidad política por los temas que atiende, experiencia suficiente, y habilidad -también política- para allegarse de un equipo de trabajo donde se asienten la toma de decisiones de gobierno.
En sistemas presidencialistas como el nuestro, el equipo de trabajo más cercano del gobernante suele llamarse “Gabinete” y tiene una función capital en el arte de gobernar. Para su integración se ocupan perfiles profesionales, gerenciales, con aptitudes, actitudes y, principalmente, que pertenezcan al equipo o elite política cercana del gobernante en turno.
Pero ¿qué es un Gabinete? En el mundo de la política se tiene una idea muy clara, el ciudadano de a pie, quizás no tanto.
Sabemos que en México y en San Luis Potosí existen grupos políticos -conocidos como élite política-, que mantienen el control de las instancias del poder político, y tienen la capacidad para sostener el funcionamiento razonable del Estado.
En otras palabras, los integrantes del gobierno -el Gabinete-, por ser el primer filtro con el gobernante, forma parte de la élite que cuida y procura el apartado político del ejercicio del poder, y lo asesora para solucionar las demandas ciudadanas.
Desde la ley y las definiciones académicas, comprender el concepto de Gabinete como una realidad política es algo complejo. Intentaré aclararlo.
Salvo equivocación mía, en nuestro Estado a lo más que llega la norma sobre el tema del Gabinete, está en los artículos 80, fracción XI, de la Constitución Estatal; y 8 de la Ley Orgánica Estatal, que indican que el Gobernador nombra y remueve libremente a los Titulares de las Secretarías de Despacho y servidores públicos del gabinete ampliado -el Gabinete-. No hay más.
Manuel Quijano Torres, académico y paisano potosino -de Matehuala-, dice que los gobernantes, élite política que monopoliza el régimen de un Estado, es un grupo con mucha relevancia social porque “su organización, decisiones y vínculos políticos, llegan a tener un gran impacto para la vida pública”.
Afirma que “de toda la estructura de gobierno, sobresalen unos cuantos, usualmente titulares de las más importantes dependencias... un pequeño círculo de colaboradores que rodea al gobernante, quienes… le asesoran sobre los problemas del Estado... destacan los Secretarios de Estado, directores y asesores. Es la plana burocrática que rodea al titular del Poder Ejecutivo”. Cierro la cita.
Con estas dos visiones y después de mucho “rollo”, abrevio: al grupo de Secretarios de Estado se le llama coloquialmente Gabinete, y tiene la capacidad para manejar el destino del Estado.
Vayamos a lo “mundano”. De los integrantes del Gabinete es importante considerar biografía y anecdotario para conocer la historia de quienes serán los principales actores del gobierno, y formarán el primer círculo del Gobernador.
Su composición permite entender la estructura, ejercicio y renovación, y llegar a deducir -en el caso de San Luis Potosí-, un cambio de la élite que dirigirá su futuro. Además, corroboramos que el ejercicio del poder tiene nombre y apellido.
Desconozco si existe algún procedimiento para reclutar o elegir de manera exitosa a los integrantes del Gabinete, a sabiendas de que ninguno -sino la educación política, y el rigor electivo- garantiza completamente resultados positivos.
Al rastrear el funcionamiento del Gabinete, conoceremos aspectos relevantes del Poder Ejecutivo, porque su constitución e historia, también será la del Gobernador. Si no me creen, pregunten a por lo menos los últimos cuatro exgobernadores como les fue en este punto, y ya de pasada, al que está a punto de terminar su mandato.
Un buen Gobernador, apoyado en su Gabinete, ocupa coordinación, colaboración, cooperación, negociación y diálogo con todos los sectores de la vida política, económica y social de la entidad que gobernará.
Por eso cobra relevancia lo escrito en mi artículo anterior al afirmar que se puede tomar como un buen indicador la importancia de elegir cuidadosamente el Gabinete en el que se apoyará el Gobernador, para que lo “vista en el arte de gobernar”. En ellos también están las esperanzas ciudadanas de un buen gobierno.
El Gobernador Electo podría ilustrarse de las acciones de sus predecesores en este rubro. Por lo pronto declaró que su Gabinete se conocerá en septiembre, afirmación que no ha impedido adelante designaciones de quienes ocuparían la titularidad de al menos 4 o 5 Secretarías de Estado.
Comienza a construir la estructura de la élite política que lo asistirá en conducir el destino de San Luis Potosí los próximos 6 años.
Invocando únicamente lo publicado en medios, y lo comentado por el Gobernador Electo, se mencionan nombres nuevos, algunos de fuera del estado. Comienza a vislumbrarse un Gabinete integrado por profesionistas y políticos afines generacionalmente, o miembros cercanos a su grupo político que lo ayudarán a tomar y mantener el control de las instancias de poder del Estado.
Algunos de quienes integrarán el Gabinete, lo acompañan hace años, por lo que es lógico creer se apoye en el grupo que confía, le es fiel, y tiene la capacidad de sostener las pautas para el funcionamiento de un gobierno con nuevo estilo.
Bajo esta lógica, también se puede entender su anuncio de renovar la estructura y el ejercicio de gobierno, asegurando que gobernará para todos los potosinos.
Los titulares del Gabinete tendrán una gran responsabilidad y tarea para seleccionar e integrar con inteligencia el equipo y estructura de su primer círculo -directivos-, así como auxiliares y asesores que los apoyen en una buena toma de decisiones.
Esta vida se rige por ciclos. Uno está por cerrarse, sin embargo, es válido apelar a la sensatez y una reflexión que permita formar un equipo sólido al identificar y reclutar a los mejores, considerando incluso a quienes ya están y han demostrado por muchos años su valía, profesionalismo, experiencia e institucionalidad.
Esta simple pero valiosa acción de combinar afinidad generacional, política y experiencia, puede enviar un poderoso mensaje motivacional de estabilidad y confianza a su futuro equipo de trabajo, además de promover nuevos paradigmas orientados a la renovación, integración y trabajo en equipo que conduzcan a la profesionalización del servicio público en San Luis Potosí.
Hoy es una exigencia de la sociedad proyectar un gobierno de leyes, pero también es importante reconocer que ningún gobierno se instala y ejerce sólo con leyes. Son los hombres a los que se inviste con la misión de gobernar quienes aseguran, en definitiva, la buena o la mala fortuna del gobierno.
jmanuelrmoreno@gmail.com