“Cuida bien de tus colmenas
y te enriquecerán la alacena”.
Para que haya enjambres necesita haber colmenas. Los municipios se han convertido en botines tanto para bandidos como para pseudopolíticos locales. Políticos bandidos y bandidos puros, por llamarlos de alguna manera, han transitado de la mano desde el siglo pasado.
En México “ponen” a los alcaldes, titulares de policía, de comercio, de obras públicas, etc., es un secreto a voces, ¿Quiénes los ponen? ¿Los procesos democráticos, de capacidades y habilidades, de mística del servicio público? No, “aquellos” los ponen.
En México brotan municipios como hiedra, y contando, de un total de dos mil cuatrocientos sesenta y nueve municipios al día de hoy, trecientos sesenta y cinco registran las tasas de homicidios más altas. Al ser la primera línea de contacto con el crimen, es a la vez la línea más débil del Estado para hacerle frente de manera efectiva, tanto por su conformación como por su lógica operacional vertical del presidente Municipal en turno.
No son policías municipales del pueblo y para el pueblo, son guardias pretorianas del ayuntamiento y de “aquellos”.
Con conceptos mal entendidos y peor ejecutados, desde “policía de proximidad”, “policía orientada a la solución de problemas” y “disuasión focalizada”, no han podido transformar la labor policial en la comuna.
La espiral de violencia se genera desde los “municipios colmena” y la violencia letal se asienta en ellos, para después en enjambres, extenderse estratégicamente en una zona y territorio, cinco, siete, diez y más municipios colmena altamente delincuenciales.
Lo grave, es que antes los “colmenares delincuenciales” eran municipios rurales, suburbanos; hoy, ya son urbanos y en algunos casos, metropolitanos.
En un dialogo criminal ficción.
-No ocupo la plaza, tomo el ayuntamiento desde su candidatura electoral, hasta su toma de protesta. – Le dijo.
-Oiga Usted, pero hay municipios bien jodidos, parecen Comala-. Contesta.
- No te creas, siempre hay algo que sacarles y pues por aquí tienen que pasar pa´ arriba-. Asevero.
-Otra cosa compa, hay municipios “friendly”, son esos que te dejan vivir, dormir y comer en buena onda, con tal que no nos metamos con ellos, aparte compa, hay municipios en los cuales desde el alcalde hasta el jefe de policía les tiemblan las corvas nomás de vernos y pos, no se meten con nosotros. – Sentencia.
TAPANCO: Otro tema, es que las diversificaciones del delito tanto locales como regionales, desafían al más pintado. Los patrones de violencia pueden ser estrictamente del bando de gobierno que escalan a delitos del común y otros mixtos, con el crimen organizado.
Ahí está el detalle (-A mí no me toca, le toca al estado o la federación, yo soy preventivo, que le entren los estatales, el Ejército, la Marina, la Guardia Nacional; yo, ni policías, ni patrullas tengo, déjenme con mis borrachitos, mis farderas y los que se roban los twinky wonders del Oxxo).
@franciscosoni