Hasta agosto de 2024, en México existían 2,478 municipios, de los cuales 1,325 se encuentra en condiciones de muy alta o alta marginación. A esta condición desfavorable se le suma la ineficiencia de su gobierno, la cual es consecuencia de la toma de decisiones equivocadas en el nombramiento de sus principales funcionarios. En su mayoría estas designaciones no corresponden a la función que desempeñarán; estas siguen criterios políticos más que técnicos. La consecuencia la sufre su población, quien recibe una deficiente recolección de basura, un pésimo servicio de agua potable, alumbrado público que no funciona de manera correcta, una policía abusiva y un crecimiento urbano desordenado.
La ineficiencia de los gobiernos municipales semiurbanos y rurales, esos que no están en la agenda de los medios de comunicación es un problema estructural, consecuencia del predominio de intereses políticos y personales en quienes toman las decisiones de políticas y de políticas. Su origen está en las campañas políticas, en donde se asumen compromisos con los patrocinadores y con quienes apoyaron durante todo el proceso electoral. Cuando se obtiene el triunfo, los primeros tienen como prioridad recuperar su inversión económica y los segundos ocupar un puesto en la administración pública municipal, aunque no tengan el perfil técnico para cumplir con eficiencia sus responsabilidades.
Los nombramientos de funcionarios se hacen de manera errónea, se pone al químico como oficial mayor, al taxista como responsable del departamento de agua potable, al abogado como contralor, al cacique como tesorero, al profesor en obras públicas. Para asumir el cargo no es suficiente presumir el nivel de estudios, se requiere que estos sean en el área que va a desempeñar para que cumplan de manera eficiente su responsabilidad. ¿Las autoridades municipales sabrán que en la mayoría de las universidades públicas del país existe una profesión que se llama administración pública? ¿Que existen especialistas en políticas públicas? Que son ellos los expertos en los asuntos públicos.
La ineficacia operativa al interior de la administración municipal lleva al conflicto entre funcionarios, quienes quieren asumir responsabilidades que no les corresponden, que no están establecidas en la normatividad; toman decisiones erróneas sobre la prestación de los servicios públicos y lo más grave, sólo para atender beneficios personales. La peor consecuencia la sufre la población, semanas sin recolección de basura, sin una gota de agua potable durante meses, calles sucias y obscuras, jardines abandonados. En campaña prometieron universidades, empleos, hospitales, se comprometen a todo, menos a lo que sí es su responsabilidad: los servicios públicos y profesionalizar su prestación para incrementar su calidad.
En resumen: los problemas de los municipios rurales y semiurbanos son políticos y de políticas, generados por compromisos políticos y personales, su ineficiencia se debe a que no se nombran funcionarios con perfiles profesionales. Es un error utilizar criterios como: financió la campaña política, apoyó en todo el proceso electoral, lazos familiares, de cuates o agradecimiento personal. La complejidad de los servicios públicos requiere de la profesionalización de la estructura de la administración pública municipal, de lo contario la calidad de los gobiernos municipales será de niveles muy bajos. Próxima colaboración: 4 de diciembre de 2024.
@jszslp