En los años que tengo de vivir en San Luis, que son todos los pocos que tengo, porque aquí nací, he visto y escuchado todo tipo de absurdos en materia de cultura gubernamental, pero nunca había visto tal cantidad de estupideces y falacias vertidas, por la instancia municipal encargada, en materia de fantasía cultural.
Casi desde el inicio de la actual administración municipal, he observado que en sus cuentas de redes sociales publican una gran cantidad de mentiras y errores. Lo mismo confunden el templo del Sagrado Corazón, con el de la Compañía, o señalan que se conmemora el 25 de agosto, porque se recuerda la visita de San Luis Rey, a esta Ciudad. Pocos desde luego, observan las tonterías, y muchos las dan por ciertas.
Ignoro quienes sean los encargados de manejar estas cuentas, pero supongo que serán personas de cierto conocimiento sobre la ciudad de San Luis Potosí, y también supongo, que los titulares de las respectivas áreas, serán los que asuman la responsabilidad por las mariguanadas publicadas en redes sociales.
La semana que concluye, leí (a propósito de algunos comentarios sobre el absurdo de los túneles potosinos) que la instancia municipal señalaba desde la cuenta de Turismo Municipal: “En eso vamos a trabajar, en ver si hay alguna manera de hacer turística alguna ruta de túneles, con la seguridad necesaria para poder ofrecer a las personas.”
Ignoraba que hubiera algún proyecto de la alcaldía para volver turísticas las falacias históricas, pero luego de ver que pretenden hacerlo con todas las que vierten en campaña, ya nada me extraña. Tampoco sabía que existieran varias rutas de túneles, pues si hablan de alguna, es que tendremos varias; quizá una solicitud de información –vía transparencia– me pueda informar de ellas, y los trabajos que en las mismas desempeña el Ayuntamiento.
Me provoca un gran espanto el saber que cuando uno pensaría que estaríamos mejor, resulta que estamos peor. Sabemos que el maestro Xavier Nava Palacios, es un pequeño burgués con cierta educación y cierto nivel de estudios; un currito ilustrado, cuyo triunfo en la contienda por la alcaldía, luego de echar a los cavernarios, garantizaría cierta mejoría en materia cultural; y pues no, estamos peor.
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En el mismo sentido, recordaremos que fue organizado un ciclo de pláticas en plataformas digitales, vía internet, que tenían por objeto recordar el aniversario del doctor Salvador Nava Martínez, prócer cívico potosino; a ellas fueron invitados como participantes: Sergio Aguayo, Tomás Calvillo, Enrique Krause, y Porfirio Muñoz-Ledo, el convocante fue el currito ilustrado, ni más ni menos.
Nada diré de los panelistas, porque ninguno necesita comentario alguno sobre su trayectoria. Si acaso señalaré que en los años de lucha navista, no creo que Muñoz-Ledo militara precisamente en las mismas trincheras que don Salvador; creo que si hubo un tipo de actuares perversos, y retorcidos contra todo aquello que caracterizó a Nava, fue precisamente don Porfirio. La cosa es que como éste anda ahora en pleitos con los cuaternarios que lo llevaron a la curul, pues hay que presentarlo como parte de este evento para que se vea que hay pluralidad.
Haré un pequeño paréntesis para recomendar al alcalde –que no creo que me lea, pero alguien le puede llevar el recado– que no le vendría mal leer el libro de nuestro paisano José Blanco-Ornelas: Biebrich, crónica de una infamia, para que conozca parte de la historia de una alimaña hoy redimida. Esto, aclaro, no le quita lo brillante (a don Porfirio, desde luego).
El evento giró en torno a una serie de alegatos donde –dijera mi amigo Tomás Gómez Mata–“poco se habló del doctor, y mucho de la dictadura amloista. ¡Recuperemos la democracia!, sentenciaban.”
Es, pues, perfectamente notorio, que Navita continúa inmerso en la muy propia actitud del currismo potosino: la invención de los enemigos.
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El asunto del virus coronado apagó casi de manera total el asunto de la interrupción legal del embarazo, votada el jueves por el pleno del Congreso Potosino. Como era obvio, después de ver la clase de onagros que integran la Legislatura, no fue aprobada. ¿Se darán cuenta que estar en contra de la interrupción legal del embarazo, no implica ser próvida?
Gracias por la lectura; quédense en casa.