Modificación de hábitos de consumo y estilo de vida

Esta vez analizaremos hábitos de NUESTRA VIDA COTIDIANA que podemos modificar con pequeños cambios en nuestro comportamiento, para bajar nuestro impacto ecológico, especialmente nuestra HUELLA DE CARBONO. Y son los siguientes:

1.- AIRE ACONDICIONADO.- En climas extremos es una necesidad y con el cambio climático está empezando a serlo en ciudades donde antes no era necesario, como es el caso de ciudades del centro de México como San Luis Potosí, entre otras. Este consumo de energía eléctrica es altísimo dentro del gasto de viviendas, fábricas, restaurantes y comercios. Nuestro mal uso se refleja en las excesivamente bajas temperaturas de algunos lugares. En algunos centros comerciales de EU, por ley se les está obligando subir la temperatura 1 o 2 grados centígrados arriba de lo acostumbrado. Algunos estudios indican que la temperatura ideal ambiental para un ser humano es 21 grados centígrados. Algunas personas bajan de más la temperatura en las noches para dormir cobijados. Este es un abuso ecológico, ¿enfrío el aire para luego calentarlo?, con un doble dispendio de energía eléctrica generada con combustibles fósiles. Usa más racionalmente el aire acondicionado. Evita los sistemas centrales, una buena opción son los Minisplits con Inverter. 

2.- ILUMINACIÓN.- En este caso debemos romper esa costumbre de dejar focos que no utilizamos encendidos, porque regresaremos después al mismo lugar. Prende y apaga según los tiempos necesarios. Utiliza focos de bajo consumo y utiliza los LEDs que son varias veces más eficientes que los antiguos y obsoletos focos incandescentes. Utiliza si puedes lámparas con sensores de movimiento y fotoceldas. La electricidad tiene un subsidio gubernamental en función de nuestro consumo. A mayor consumo, menos subsidio. Ecológicamente este subsidio es un grave error, ya que al final subsidia la contaminación, ya que gran parte de nuestra electricidad se genera quemando combustibles fósiles por miles de toneladas. Analiza la iluminación de tu casa y seguramente habrá lámparas y zonas con focos de más. Afloja algunos de los que estén de sobra.

3.- CALEFACCIÓN.- Es el mismo caso del aire acondicionado, pero a la inversa. Se calientan espacios de más para después enfriarnos quitándonos ropa o refrescándonos de cualquier manera, otro abuso ecológico de nuestra parte. En invierno, en la mayoría de las ciudades de nuestro país no se necesita calefacción, pero donde son ciudades más altas y frías hay que moderar el uso de calefactores, especialmente eléctricos, que son los más ineficientes, son más eficientes los de gas. Evita sistemas de calefacción central, son los más costosos de operación e ineficientes, estos sistemas calientan todo el espacio necesario más el espacio no necesario.

4.- REFRIGERACIÓN.- Después del aire acondicionado y calefacción, el refrigerador es el costo energético más alto de la casa. Usa refrigeradores adecuados al tamaño de tu casa, de tu familia y de tu presupuesto. Existen refrigeradores a precios muy accesibles de última generación con un sistema denominado INVERTER, que es diferente en parte al de los compresores normales, cuyo gasto energético es mucho menor y cuya eficiencia es mucho mayor. Gracias a estos sistemas con INVERTER se ha hecho muy viable la refrigeración con sistemas solares. Por experiencia propia, la energía del refrigerador consume más que la energía de toda la casa y ahora tenemos un sistema solar que funciona con un refrigerador grande sin ningún problema.

5.- ESCUELAS.- Gran parte de la contaminación de las ciudades tiene su hora pico en la MOVILIDAD de alumnos hacia o desde las escuelas. Una de las lecciones que nos está dejando esta PANDEMIA es que gran parte de las actividades educativas pueden ser ejecutadas por medio digitales, es decir NO PRESENCIALES. Debemos de adaptarnos y apoyar esta medida que tendrá grandes beneficios ecológicos además del aumentar el control de los contagios. Sabemos que implicará grandes cambios y sacrificios en nuestra forma de vida familiar, pero tenemos que apoyarnos entre todos y hacerlo, por el momento no se ve otra solución y hay que valorar sus BENEFICIOS ECOLÓGICOS. Todas las crisis dejan beneficios si los sabemos buscar.

6.- CONSUMO DE AGUA.- En este caso el efecto de su abuso tiene varios efectos económicos, sociales además de ecológicos, ya que al consumir agua fría consumimos energía eléctrica que se ocupó para bombearla; al consumir agua caliente, además de la energía ya mencionada, consumes gas y derivados de petróleo para calentarla. La solución: no abrir las llaves a todo lo que se puede, abre sólo la mitad y gastarás menos agua, electricidad y gas. UN EFECTO ECOLÓGICO POSITIVO TRIPLE.

Ayudemos al planeta, tus hijos y demás descendientes te lo agradecerán O TE LO RECLAMARÁN.