Paz positiva

“La paz no sólo implica la 

ausencia de violencia, también, 

la ausencia de corrupción” 

IEP

  

La semana pasada hablábamos del Índice Global de Paz, el cual, es un indicador cuya creación es autoría del Instituto para la Economía y la Paz (IEP), además de, la Universidad de Sidney, y, del semanario británico El Economista.

También señalábamos que, para el desarrollo de este indicador, los autores habían desarrollado un concepto novedoso denominado Paz Positiva, la que consiste en la presencia de actitudes, instituciones y estructuras que construyen y sostienen sociedades pacíficas. Este tipo de paz busca siempre una conceptualización de la paz más allá del conflicto y la violencia (Paz Negativa).

La paz positiva es cuando los actos de violencia son cada vez menos tolerados en la sociedad. Es por eso, que las instituciones buscan las necesidades de la sociedad para resolverlos de manera no violenta.

Las categorías que alimentan este concepto son: a) El buen funcionamiento del gobierno, b) Un entorno empresarial sólido, c) La distribución equitativa de los recursos (educación, salud e ingreso), d) La aceptación de los derechos de los demás, e) La buena relación con los vecinos, f) El libre flujo de información, g) Un nivel de educación y desarrollo del conocimiento, y, bajos niveles de corrupción. 

Sin embargo, cabe precisar en el informe del Índice de Paz en México 2020 (hecho precisamente por el instituto para la Economía y la Paz), nos señala que, nuestro país presenta un gasto mínimo en seguridad interna y en su sistema judicial. De ahí, se le dificulta desarrollar capacidades suficientes en su sistema judicial para hacer el frente a las necesidades que tiene el país y con ello poder combatir de forma positiva el aumento de violencia.

México tiene un promedio de 3.6 jueces y magistrados cada 100,000 habitantes, este número de promedio solo restringe la capacidad en el sistema judicial para procesar los casos lo cual provoca un alto número en las tasas de impunidad, precisa el informe. 

La violencia en México fue dividida en las siguientes cuatro 

categorías: 

(I) Violencia Política.

(II) Violencia Oportunista, por ejemplo, extorsión y robo. 

(III) Violencia Interpersonal, por ejemplo, agresiones, delitos sexuales y violencia familiar.

(IV) Homicidios cuyos altos índices fueron relacionados por el IEP con venta de estupefacientes y conflictos entre pandillas.

Por otra parte, durante los últimos 10 años la evaluación que hacen del gobierno, se ha deteriorado la confianza en el estado de derecho, la percepción de corrupción y en los procesos políticos. México es el lugar 128 de 163 países en el tema del control de la corrupción (IEP, 2020).

De momento se agotan las líneas de mi columna, las y los espero con el gusto de siempre el próximo viernes. 

carloshernandezyabogados@hotmail.com