En San Luis Potosí, el próximo 21 de septiembre no se corre solo por deporte: se corre por vida, por dignidad y por esperanza. La Carrera Atlética del Patronato Pro Paciente Oncológico invita a todos a sumar kilómetros que se transforman en tratamientos, en medicinas y, sobre todo, en acompañamiento para niños y adultos que luchan contra el cáncer.
El Patronato nació en 1984, con el compromiso de atender a pacientes con cáncer de escasos recursos que no cuentan con seguridad social. A lo largo de más de cuatro décadas, se ha convertido en un sostén para miles de familias, en su mayoría provenientes de comunidades rurales que enfrentan el doble reto de la enfermedad y la falta de recursos. Muchas llegan sin un techo dónde dormir, obligadas a pasar noches en albergues improvisados o incluso en la calle, mientras esperan la atención de sus seres queridos.
Detrás de cada paciente hay una historia de lucha y sacrificio: madres que acompañan a sus hijos en interminables jornadas de quimioterapia, padres que gastan hasta el último peso en medicamentos, familias que dejan atrás su vida cotidiana para aferrarse a la esperanza. El Patronato ha sostenido esa lucha año tras año, y la Carrera Atlética se ha convertido en una de sus principales actividades de recaudación y, sobre todo, en un símbolo de solidaridad colectiva.
Participar significa tender la mano a quienes atraviesan la carrera más difícil de sus vidas. Con un donativo de 300 pesos por inscripción, cada corredor contribuye directamente a que el Patronato pueda seguir ofreciendo tratamientos, medicinas y apoyo humano a quienes más lo necesitan. Los boletos se pueden adquirir en puntos como Plomería Selecta, Botanas Campesinas Jr, Body Spa, Fit Camp Glow y sucursales de Costanzo en la capital potosina.
El recorrido será en el Parque de Morales, con distancias accesibles de 3, 5 y 10 kilómetros, pensadas para que cualquiera pueda participar: corredores, caminantes, familias enteras. Porque la lucha contra el cáncer nos necesita a todos, y la solidaridad también se contagia.
Pero el apoyo no termina en la línea de meta. El Patronato también abre sus puertas a quienes quieran integrarse como voluntarios, colaborando cada semana en actividades de acompañamiento, recreación y cuidado tanto para los niños como para sus familias. Ser voluntario significa regalar tiempo, escucha y presencia; es dar un respiro a quienes pasan días enteros en salas de espera o enfrentan la incertidumbre de un diagnóstico.
Este 21 de septiembre, corre, camina, acompaña o súmate como voluntario. No importa la distancia ni la forma: cada paso y cada gesto serán semillas de esperanza para quienes enfrentan la carrera más difícil de sus vidas.
¡Te veo en la meta!