CIUDAD DE MÉXICO, 7 de marzo (EL UNIVERSAL).- La chía es un superalimento reconocido por su perfil nutricional, que está ganando popularidad en el mundo de la alimentación saludable, respaldado por expertos de la Escuela de Salud Pública T.H. Chan de la Universidad de Harvard.
"Estas diminutas semillas contienen ácidos grasos omega-3, fibra, proteína, calcio, fósforo y zinc, y están siendo aclamadas como un ingrediente funcional para mejorar la calidad nutricional de la comida."
Además de su versatilidad en la cocina, las semillas de chía son altamente valoradas por sus beneficios para la salud.
De acuerdo con la Universidad de Harvard, estos son los beneficios de este superalimento respaldado por la ciencia:
- Efecto antioxidante: Las semillas de chía son ricas en fenoles, antioxidantes que pueden reducir hasta el 70% la actividad de los radicales libres, contribuyendo así a la prevención del envejecimiento prematuro de la piel y reparando los tejidos musculares.
- Protección del corazón: Gracias a su alto contenido de omega-3, las semillas de chía poseen propiedades antiinflamatorias, antitrombóticas y vasodilatadoras, lo que ayuda a regular la presión arterial y reduce los niveles de colesterol en la sangre.
- Regulación del colesterol y la diabetes: Esta semilla contiene fibra que ayuda a regular los niveles de azúcar en la sangre y capturar parte de esos azúcares, liberándolos lentamente para evitar picos de glucosa e insulina.
- Ayuda en la pérdida de peso: Al expandirse en el estómago y generar una sensación de saciedad, las semillas de chía pueden contribuir a controlar el apetito y reducir la ingesta calórica.
- Cuidado de los huesos: Con solo 30 gramos de semilla, se puede obtener el 20% de la cantidad recomendada de calcio, esencial para la salud ósea.
La chía tiene un sabor suave y agradable, lo que la hace adaptable para usar en una variedad de recetas tanto dulces como saladas. Puedes disfrutar de diferentes maneras, como agregarla directamente a tu dieta diaria, tomando una cucharada por la mañana y otra por la tarde o noche. También puedes incorporarla en varios alimentos, como pan, ensaladas, postres, batidos, agua, frutas, smoothies y legumbres, lo que ofrece una amplia gama de posibilidades culinarias.
Una forma popular de consumir chía es mezclar las semillas con agua, jugo u otro líquido. Las semillas absorben el líquido rápidamente, aumentando su volumen hasta nueve o diez veces en menos de diez minutos. Esta mezcla se puede almacenar en la nevera y consumir en cualquier momento que desees, lo que la convierte en una opción práctica y saludable para integrar en tu rutina diaria.