El cilantro, cuyo nombre científico es Coriandrum sativum, es una hierba que se emplea de manera extensa en la gastronomía global. Su origen se encuentra en el norte de África y el sur de Europa, donde ha tenido un papel importante tanto en la cocina como en la medicina tradicional.
Esta planta se distingue por sus hojas verdes, que son utilizadas como condimento y valoradas por su sabor característico y sus propiedades beneficiosas.
En la cocina, el cilantro se integra en una amplia gama de platillos, desde salsas hasta guisos. Su sabor distintivo enriquece los alimentos y aporta frescura a las preparaciones. En la gastronomía mexicana, se considera un ingrediente esencial en la elaboración de salsas y tacos, mientras que en la cocina asiática se utiliza en curries y ensaladas, aportando un matiz particular a los sabores. Su versatilidad también se observa en la cocina mediterránea, donde complementa diversas preparaciones de carne y pescado.
¿Cuáles son los beneficios de el cilantro?
De acuerdo con el Poder del Consumidor, el cilantro se incorpora en varias recetas debido a sus propiedades beneficiosas, que incluyen efectos estimulantes, antiespasmódicos, antiinflamatorios y antibactericidas.
Además, es rico en vitaminas y antioxidantes. Entre las vitaminas presentes en el cilantro destacan la vitamina C y K, y en menor proporción, las vitaminas A, B1 y B2. También se encuentra en él una variedad de minerales como hierro, calcio, fósforo y magnesio. Por su bajo contenido calórico, el cilantro se presenta como un condimento ideal para enriquecer los platillos.
Otra de las características del cilantro es su capacidad para facilitar la digestión, previniendo problemas como el estreñimiento y los cólicos. Además, actúa como diurético, ayudando al organismo a eliminar toxinas.
Asimismo, las hojas de cilantro masticadas sirven tradicionalmente como remedio contra el mal aliento.