Probablemente alguna vez te ha pasado: estás a punto de preparar un delicioso desayuno con un huevo que, por fuera, parece perfecto. Pero, al romperlo, notas una mancha roja en la yema. Antes de desecharlo, es importante entender las razones detrás de este detalle y si es seguro comerlo.
Las manchas rojas que a veces aparecen en las yemas de los huevos son gotas de sangre. Healthline, un sitio estadounidense especializado en salud, explica que estas manchas se forman naturalmente y son consideradas un defecto por los productores de huevos, aunque no indican que el huevo sea peligroso o insalubre.
Contrario a algunos mitos, estas manchas no indican que el huevo estaba fecundado. En realidad, son el resultado de la ruptura de pequeños vasos sanguíneos en los ovarios de la gallina o en el oviducto, el tubo a través del cual los óvulos pasan desde los ovarios hacia el exterior. Los ovarios de una gallina están llenos de vasos sanguíneos y, ocasionalmente, uno de ellos se rompe durante la formación del huevo.
El Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) señala que los huevos con manchas de sangre son perfectamente seguros para comer, siempre y cuando estén bien cocidos. Esta recomendación es crucial en cualquier caso, pues consumir huevos crudos o mal cocidos aumenta el riesgo de salmonelosis.
Si encuentras una mancha de sangre en un huevo, tienes dos opciones: revolverlo para que la mancha se mezcle y no sea visible, o usar un cuchillo para remover la mancha. Desperdiciar el huevo no es necesario, ya que las manchas de sangre no afectan su seguridad o valor nutricional.
Las manchas de sangre en los huevos son relativamente raras, presentes en menos del 1% de los huevos. Sin embargo, ciertas condiciones pueden aumentar la probabilidad de encontrarlas:
Huevos marrones: Las gallinas que ponen huevos marrones tienen una mayor incidencia de manchas de sangre en comparación con las que ponen huevos blancos.
Edad de las gallinas: Las gallinas más viejas tienden a poner más huevos con manchas de sangre.
Huevos frescos de granja: Es más común encontrar manchas de sangre en huevos frescos de granja debido a la menor intervención de procesos industriales de control de calidad.
Para minimizar la presencia de manchas de sangre, los fabricantes de huevos utilizan un proceso llamado trasluz, donde una fuente de luz brillante se emplea para detectar imperfecciones dentro del huevo. Esto reduce significativamente las probabilidades de que las manchas de sangre lleguen a los consumidores.