Después que el Juzgado Sexto de Distrito otorgó la suspensión provisional de las obras reconstructivas en calles del barrio de San Miguelito, se generaron puntos de vista encontrados entre residentes de dicha zona habitacional, pues mientras algunos confiaron que la autoridades transparenten el proyecto, un vecino reclamó que se haya detenido los trabajos.
Aunado a ello, finalmente la empresa constructora a cargo de la obra detuvo los trabajos y retiró la maquinaria, aunque por la mañana seguían en la intervención. La Secretaría de Desarrollo Urbano, Vivienda y Obra Pública (Seduvop), afirmó que atendió "puntualmente" la orden judicial y que las piezas se encuentran bajo resguardo en el almacén de la institución.
En rueda de prensa, integrantes de la Comisión de Vecinas y Vecinos Voluntarios del Barrio de San Miguelito, dijeron que demandan pruebas, dictámenes, tiempos, cronograma, presupuesto, así como un proyecto integral de movilidad acorde a las Leyes de Cultura, Construcción y Movilidad.
Reclamaron que la Seduvop no ha mostrado el plan integral de ejecución, ni transparentado los permisos avalados por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y protección de adultos mayores, quienes tienen dificultades para la movilidad a sus domicilios.
Dijeron que era necesaria la suspensión para que Gobierno del Estado entregara la información solicitada, por lo cual, no significará el paro total de los trabajos, sino la continuación de los mismos una vez atendidos los reclamos.
"Nosotros estamos en total apertura para poder participar y hacer un desarrollo participativo con ellos, en el sentido de que cumplan con la norma y con las necesidades de los vecinos; que esté dentro del marco de la legalidad el proyecto", señalaron.
Minutos más tarde que los ciudadanos se pronunciaran, arribó un colono de nombre Carlos Gárrigos, quien se mostró a favor del retiro de una parte del material y sustituirlo por concreto estampado, así como dejar "vestigios" en algunas calles.
Si bien coincidió con algunos aspectos de los residentes opositores, dijo que los adoquines no reciben mantenimiento con el paso de los años, con lo cual termina por convertirse en hoyancos que afectan a los conductores de automóviles.