En la avenida 20 de Noviembre, un pozo de visita de drenaje amenaza con causar un accidente automovilístico.
La oquedad es imperceptible y los vecinos colocan señales de advertencia, que ocasionalmente arrastran los camiones cuando pasan. Fue necesario instalar llantas y cartones para señalar el sitio y evitar que caiga un ciclista.
El desgaste o destrucción de tapas en pozos de visita es frecuente, porque los responsables de los proyectos no consideran el tipo de vialidad de la que se trata o la calidad de las tapas y brocales, para que aguanten el tránsito de vehículos pesados.
Las tapas por lo general son fabricadas de materiales de concreto y acero, pero la calidad es distinta según el proveedor.
En el caso de la alcantarilla, se encuentra en una vialidad que recibió mantenimiento en el trienio municipal capitalino de Ricardo Gallardo, y sin embargo no todo sucedió como los vecinos esperaban.
La calle fue repavimentada, y se daba por entendido que los constructores revisaron el estado total de la avenida, que recibiría mantenimiento total.