Luego de que el Instituto de Fiscalización Superior del Estado (IFSE) detectó una diferencia aproximada de 400 mil pesos entre lo reportado por el Ayuntamiento y lo verificado en la auditoría a los ingresos de parquímetros, el alcalde Enrique Galindo pidió que el proceso de revisión avance hasta su conclusión antes de fijar una posición definitiva.
El edil explicó que la notificación apenas fue recibida por el municipio, por lo que las áreas correspondientes se encuentran en la fase inicial de entrega de comprobaciones y solventación.
Señaló que las auditorías suelen generar observaciones preliminares que deben analizarse, justificarse o aclararse dentro de los periodos que marca el proceso, y que únicamente en caso de no satisfacer los criterios del órgano fiscalizador estas podrían derivar en responsabilidades posteriores.
Galindo consideró que los hallazgos forman parte de los mecanismos habituales de vigilancia financiera, donde primero se señalan inconsistencias y posteriormente se abre una etapa de defensa documental para confirmar o descartar los montos señalados por la instancia fiscalizadora. En este caso, aseguró que el municipio aún cuenta con tiempo para responder y sustentar la información necesaria.
El alcalde afirmó que las finanzas municipales continúan estables y bajo esquemas de operación transparentes. Destacó que la administración mantiene procesos de licitación y manejo presupuestal abiertos al escrutinio público, así como plataformas de consulta donde cualquier ciudadano puede revisar información financiera, contractual y administrativa.
Galindo reiteró que fijará una postura formal una vez que el periodo de solventación concluya, y confió en que el Ayuntamiento podrá aclarar las cifras observadas por el IFSE antes de que el proceso llegue a etapas de responsabilidad.