San Luis Potosí cerrará este 2025 con un crecimiento económico positivo, aunque de ritmo moderado en comparación con otras entidades del Bajío y del Centro-Norte del país, de acuerdo con los resultados más recientes del Indicador Trimestral de la Actividad Económica Estatal (ITAEE) del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Las cifras oficiales señalan que la economía potosina registró un avance anual cercano al 1.3 por ciento, sostenido principalmente por el sector industrial, en especial la manufactura y la construcción, que se consolidaron como los principales soportes de la actividad productiva en la entidad durante el año.
En contraste, el sector primario presentó un retroceso relevante, particularmente en actividades agrícolas y ganaderas, lo que frenó un mayor dinamismo económico y evidenció las dificultades estructurales y climáticas que enfrenta el campo potosino.
A nivel regional, el desempeño de San Luis Potosí se ubicó por debajo del registrado en Guanajuato, que destacó por uno de los mayores crecimientos del Bajío, así como ligeramente por debajo de Aguascalientes, que mantuvo una expansión estable. No obstante, la entidad potosina superó el comportamiento económico observado en Querétaro, donde el crecimiento fue más limitado a lo largo de 2025.
De esta manera, San Luis Potosí se colocó en una posición intermedia dentro del Bajío, con una economía que avanzó de forma sostenida, aunque sin alcanzar los niveles de mayor dinamismo regional.
El Inegi subrayó que el sector secundario fue determinante para evitar una desaceleración más pronunciada, mientras que el sector terciario, relacionado con el comercio y los servicios, mostró un crecimiento moderado, en línea con el comportamiento del consumo interno y la demanda regional.
El balance económico del estado se dio en un contexto nacional marcado por una desaceleración general, lo que refuerza el papel estratégico de la actividad industrial de SLP dentro del panorama económico del Centro-Norte del país.