Un intenso tráfico se registró este día, en la carretera 57, derivado de la movilización de las calderas gigantes, que por sus dimensiones requirieron el cierre de un carril, habilitando la carretera a la circulación en doble sentido de sur a norte.
Este miércoles, se retomó el traslado de los reactores con destino a la refinería de Tula, en Hidalgo, que durante varias semanas permanecieron a la altura de la localidad el Leoncito, antes del kilómetro 53+900, lo que implicó, además, que se desmontarán los puentes localizados para su paso, así como los señalamientos viales.
Mediante grúas se realizaron las maniobras, pues fue necesaria la intervención de estas en tres puentes, dos vehiculares y un peatonal, los cuales se localizan entre el kilómetro antes mencionado y la vía que conduce hacia la cabecera municipal de Villa Hidalgo.
Por este tramo, desde hace unos meses, se ejecutan obras de lo que será la nueva carretera de cuota, paralela a la 57, que conectará el libramiento Oriente con la autopista Cerritos-Rioverde, otro factor que en semanas anteriores también originó un congestionamiento vehicular.
Cabe recordar que el traslado de las calderas, es un proceso lento y complejo, principalmente por la modificación de los puentes, que requiere a su vez, el apoyo de otras instancias o autoridades en el tema vial. Ate ello, se pide a los automovilistas extremar precauciones y atender las indicaciones que emiten las autoridades.