La capital potosina está llena de cables que materialmente construyen una telaraña que abarca toda la ciudad.
Proveedores de servicios de telefonía, internet, televisión y otros se cuelgan de la red de postes y saturan las calles, tanto de la zona urbana en general como del Centro Histórico.
En la avenida Cuauhtémoc, entre las calles Tomasa Estévez y Benigno Arriaga cruzan los cables por todos lados, las empresas ni siquiera miden la altura y exponen a que algún camión de grandes dimensiones derribe postes y deje sin energía a los vecinos y al hospital del Seguro Social que ahí se ubica.
Las marañas y tendederos de cables se repiten por distintos puntos de la ciudad. En la Industrial Aviación usuarios que cancelaron hace tiempo cancelan el servicio no han visto que retiren los cables, al contrario, se sumaron otros y el espacio está saturado. Ya ocurrió que un tráiler se llevó como fichas de dominó alrededor de siete postes en que en la esquina de la calle 6 y la calle 13. La mitad de la colonia se quedó sin energía eléctrica ni internet.
En el cruce de avenidas la escena empeora: en Juan del Jarro y Damián Carmona hay tendidos de compañías que ya no prestan el servicio, también en Xicoténcatl, en Pascual M. Hernández y en 5 de Mayo, desde sus cruces con la calle Ignacio López Rayón hasta la avenida Salvador Nava Martínez.