Debido a la crisis hídrica, en la zona metropolitana, la extracción de agua potable de fuentes subterráneas pasó del 76 al 92 por ciento, según los últimos estudios realizados, advirtie el presidente del Consejo Hídrico Estatal (CHE), Jonathan Quintero García.
El experto aseguró que mientras el Interapas asegura que se extrae el 76% del agua potable de subsuelo y el otro 24% de las presas, debido a la crisis hídrica se aceleró el proceso y según los más recientes estudios, hoy en día, el 92% del agua disponible en la ciudad para el uso de consumo humano proviene de pozos.
Quintero explicó que hay factores naturales como el cambio climático que han provocado que la sequía sea más intensa y extensa. Dijo que con independencia de las cifras, el del Valle de San Luis Potosí es un acuífero que cada vez se recarga menos, justamente debido al desarrollo urbano que se realiza sobre las áreas de recarga, principalmente en la Sierra de San Miguelito.
Recordó que cada vez hay menos agua y cada vez también hay más inundaciones, porque hay más urbanización para áreas que no deberían ser pobladas. Agregó que el 24 por ciento de la población que, según cifras de Interapas, se abastece de aguas subterráneas ahora no tiene y eso ha afectado bastante.
Con el inicio de la crisis del agua, los estudios posteriores indican que ahora la cantidad de personas que dependen el agua superficial se redujo, y toda la población de la zona urbana de la capital depende del acuífero.
“Hay factores naturales como el cambio climático que hace que la sequía sea tan extensa y tan intensa, y también según en factores de la acción humana tales como el desarrollo urbano