El grupo interdisciplinario “Hablemos de Hikuri”, en conjunto con la consultora de Asesores Socioambientales, Agrícolas y Asociados en México (ASAAM), informó que el Hikuri también conocido como peyote será reconocido como una especie en peligro de extinción por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
Señalaron que esta situación se dio gracias a que el grupo “Hablemos de Hikuri”, junto a la Facultad de Ingeniería de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, presentó un proyecto a la Semarnat en 2021 con una serie de evidencias luego de aplicar el método de evaluación del riesgo de extinción de las especies silvestres en México estipulada en la NOM-059-SEMARNAT-2010.
El proyecto, “Propuesta de cambio de categoría de la NOM-059- SEMARNAT del Lophophora williamsii, de sujeta a protección especial (Pr) a en peligro de extinción (P)”, fue realizado por el estudiante José Carlos Covarrubias Bautista, alumno de la Carrera de Ingeniería Ambiental, quien contó con el apoyo de José Luis Flores Flores de la UASLP y el cofundador de “Hablemos de Hikuri”, Pedro Nájera Quezada.
El grupo interdisciplinario puntualizó que dicha evaluación reflejó que la especie, debería pasar de la categoría de riesgo Pr (protección especial) a P (en peligro de extinción), puesto que la suma de los criterios de evaluación arrojó un valor de 2.09 siendo 2 o más el valor necesario para su inclusión.
Es decir, el peyote pasó de una categoría de riesgo menos a una mayor a consecuencia de que el nivel de impacto de las actividades humanas sobre el hábitat y el hábitat remanente no permite la viabilidad de las poblaciones existentes.
Ante esto, el grupo destacó que para las personas provenientes del pueblo indígena Wixarika, cuya asamblea tradicional establece su consumo como parte de sus usos y costumbres bajo un contexto ceremonial, no existirá ninguna implicación.
Sin embargo, para las personas externas a las comunidades se aplicará el artículo 420 del Código Penal Federal, que señala de uno a nueve años de prisión o una multa equivalente a 300 o 3 mil UMAs a quien deprede a la cactácea.
Hablemos de Hikuri sentenció que la protección de las especies se realiza con la preservación de las mismas en sus ecosistemas naturales lo que permitiría la supervivencia de la comunidad biológica.
Exhortan a la ciudadanía a no asistir o promover ceremonias de turismo psicodélico disfrazadas de medicina alternativa para extraer los ejemplares de la vida silvestre.