Residentes de doce áreas del Hospital Central Ignacio Morones Prieto expusieron a directivos de ese centro hospitalario, de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí y de la Secretaría de Salud serias deficiencias en ese centro de salud que afectan el trabajo de los médicos practicantes, por lo que declararon que laborarán bajo protesta este fin de semana y el lunes decidirán otras acciones si no hay respuesta.
En una carta presentada el viernes al director del Central, Alfonso Pinedo Onofre, al director de la Facultad de Medicina de la UASLP, Francisco Herrera, y a la integrantes de la Dirección de Educación e Investigación y a la Oficialía Mayor de la SS, representantes de los médicos residentes se inconformaron ante deficiencias en infraestructura, servicios y pagos que afectan sus labores.
Entre otras, indicaron un manejo sanitario inadecuado en el comedor, que se refleja en comidas de mala calidad, preparados sin higiene, incluso con cucarachas en los platos. También señalan que, por falta de personal, no hay servicio para el turno nocturno.
También se quejaron de que la zona de descanso, hasta 45 residentes se hacinan en un área de 12 por dos metros, que no satisface los requerimientos de descanso de residentes que trabajan turnos de hasta 32 horas. En los baños, hicieron notar los inconformes, falta jabón y papel higiénico.
En materia de ingresos, los residentes explicaron que reciben una beca de apoyo a su labor, que frecuentemente reciben a destiempo, además de que sufren descuentos que consideran injustificados, al desconocer el destino de esos recursos.
Por lo que toca al uniforme que se les proporciona, los residentes indicaron que se trata de un beneficio que debe entregarse cada 6 meses, pero hasta ahora, la obligación no se ha cumplido.
También denunciaron el desabasto de medicamentos e insumos, lo que contradice el discurso oficial de que no hay dificultades. “En realidad, existe mucho desabasto que afecta la atención médica de los pacientes”, señalan.
Los residentes indicaron en la carta que laborarán este fin de semana bajo protesta, esperando que sus demandas sean atendidas en esas 48 horas.
Si no hubiera respuesta, anunciaron que realizarán este lunes una asamblea permanente en la que se decidirán los pasos a seguir.