“Para las malas prácticas no se requiere ser outsourcing”, señaló Héctor Márquez Pitol, director de Relaciones Institucionales de Manpower Group quien explicó que decir que se erradicará el outsourcing, sería cerrarle todas las formas de trabajo a las empresas medianas y grandes y entonces mandar a los empleados a la informalidad.
Dijo que, en realidad la intención del gobierno federal es regular y frenar a las empresas manufactureras que estén llevando a cabo una evasión fiscal, por lo que ve como algo positivo el que se regule y se controle las compañías que no están dadas de alta como outsourcing y cuya actividad preponderante no es la tercerización de personas.
Explicó que, se debe diferenciar entre el outsourcing legal y el ilegal, puesto que hay quienes facturan nóminas sin estar constituidas propiamente como outsourcing, sino de otras formas como podrían ser despachos, cooperativas o sindicatos y desde ahí facturan nóminas sin pagar los impuestos y las aportaciones al IMSS e Infonavit, ni siquiera el impuesto sobre la nómina estatal.
“Esas empresas que realmente no son de outsourcing son las que hacen la evasión, pero están siendo señaladas como tal debido al ejemplo que puso el Ejecutivo de la Nación”.
En la práctica, la tercerización de personal está presente en el 99 por ciento de empresas medianas y grandes en el país, aseguró.