A pesar de los llamados de la Secretaría de Salud para contenerse en sus casas, miles de potosinos llevaron “hasta al perico” a las plazas comerciales, donde se encontraron muy laxos filtros de acceso, y lo que parece ser la nula responsabilidad de padres de familia y grupos de jóvenes que cargaron con todo mundo.
A toda hora, era posible ver la llegada de taxis con familias enteras, muchas sin cubrebocas. De manera similar a lo que ha ocurrido en las últimas semanas en las calles Hidalgo y Zaragoza en el Centro Histórico, los miles de potosinos que desafiaron la pandemia este martes, por igual se fueron de compras que a puntos de reunión para consumir alimentos o simplemente a pasear.
Las instituciones bancarias también mostraron la urgencia de las personas por sacar dinero. Largas filas llevaron a algunos a realizar trámites hasta en un periodo de 3 a 4 horas, o a desarrollar sus actividades en forma pausada en lugares cerrados como las plazas comerciales, en las que se suma el factor adicional del uso de aire acondicionado, uno de los principales vehículos de los virus suspendidos en el aire.
Por otra parte, la urgencia de hacer compras se reflejó también en el intenso tránsito vehicular de las avenidas concurrentes hacia las plazas comerciales, como no se había visto desde la primera quincena de marzo.