Redacción Pulso se lleva el primer lugar en concurso interno de altares de muertos

Dedicado a Cristina Pacheco, periodista destacada

El equipo de Redacción de Pulso, Diario de San Luis, se alzó con el triunfo en el concurso interno de altares de muertos organizado por la casa editorial.

El equipo comandado por Estrella Govea, joven entusiasta reportera, agregó los elementos que representaron un altar entero. En la lluvia de ideas, surgió dedicar la obra de arte a Cristina Pacheco, periodista de toda una vida y ejemplo a seguir por compañeros que han destacado en su trayectoria.

El altar llenó los requisitos de contar con la sal y el mantel blanco, a manera de representación de La pureza. Incluye entre los eventos el agua como pureza y mitigadora de la sed, las velas para que la flama guíe a los muertos, las calaveritas como símbolo de la tradición prehispánica y el copal y el incienso a manera de reverencia.


Las flores adoran y aromatizan el lugar durante la estancia del ánima, y el pan de muerto es elaborado de diferentes formas como parte central de los elementos para alimentar a los difuntos. El papel picado es el colorido y alegría pero además es la viva señal del aire.

Por otra parte, le fueron agregados alimentos para deleitar a los muertos, la fotografía del personaje central, el arco para guiar a la entrada del mundo de los muertos y la cruz de cal con pétalos de cempasúchil para representar la resurrección y conexión entre la Tierra y el cielo.

Una parte estremecedora de la narrativa del altar, incluyó las figuras de nuestros periodistas y trabajadores cuyas fotografías estuvieron al alcance de los realizadores del altar. Aparecieron entre ellos Eduardo de Santiago, Eduardo López Cruz, Manuel Aguilar Torres, Lucía Eugenia Torres Pereda, Enriqueta Martínez Fonseca, Juan Antonio García Cardona, Juan Mireles Calderón, Antonio Ávalos Méndez y Luis Fernando Ángel Vázquez.

El altar incluye toda la parte conceptual que dicta la tradición mexicana, sin extranjerismos, y recordando que en este país, los muertos llegan para convivir con sus seres queridos y las personas que le rodearon.