Habitantes de la región Huasteca y zonas cercanas reportaron haber visto una intensa luz en el cielo, seguida de un fuerte estruendo. Lo que presenciaron fue la entrada a la atmósfera de un pequeño asteroide, explicó el doctor Roberto Bartali Marchetti, profesor e investigador de Astronomía y Astrofísica en la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP).
"Fue una roca de aproximadamente un metro de diámetro, con un peso estimado entre 3 y 5 toneladas, que ingresó a nuestra atmósfera a velocidades de hasta 70 mil kilómetros por hora", detalló el académico. Al penetrar a esa velocidad, el objeto se calentó de forma extrema por la fricción con el aire, provocando una explosión a unos 30 kilómetros de altura, misma que generó el estruendo que muchas personas escucharon.
Este tipo de eventos, aclaró Bartali, no son tan raros como parecen. "Ocurren en promedio cada 14 días en distintas partes del planeta, pero como la mayoría suceden sobre el océano o zonas despobladas, pasan desapercibidos. La diferencia es que esta vez fue visible desde localidades habitadas en la Huasteca".
Aunque hay muchos reportes ciudadanos, no es posible determinar con certeza dónde cayó el objeto o si llegaron fragmentos al suelo. "Se desintegró en el aire, pero podrían haberse dispersado restos del tamaño de una canica o un limón", explicó. Aun así, por las características del terreno y la vegetación, es muy difícil localizarlos.
El investigador también destacó que un prototipo desarrollado por él y sus estudiantes en la UASLP logró detectar el evento mediante un sistema de radiofrecuencia. Esta tecnología permite captar los ecos de ondas de radio que rebotan cuando un objeto cruza la atmósfera, proporcionando información valiosa para su análisis.
"Ojalá algún día México cuente con más herramientas como esta. Estamos trabajando en ello desde la universidad", apuntó Bartali.