Ordenado el 25 de agosto de 1971 por el obispo de la Diócesis de San Luis Potosí, Estanislao Alcaraz y Figueroa, y amigo personal del obispo de Texcoco Juan Manuel Mancilla, este domingo fue celebrado por su jubilación como renuncia canónica, el presbítero Valentín Ruiz Flores, por vecinos y feligreses de la colonia Industrial Aviación.
Para Valentín Ruiz, la unidad y las vocaciones forman parte de los legados que quiere dejar.
Con mariachis y una misa concelebrada se despidió de los feligreses en su última parroquia, ahí recordó que las vocaciones darán cinco nuevos sacerdotes a partir del 31 de julio, fecha del 170 aniversario de la Diócesis de San Luis Potosí.
Una vez ordenado, fue párroco en el municipio de Charcas; luego se le asignó la parroquia de San Ciro de Acosta, fue párroco titular en Rioverde, después en Cristo Rey, y posteriormente salió a estudiar a Roma el área de teología dogmática, con enfoque en la cristología, y luego estudió una especialidad en catequesis en Brasil y en la ciudad de Medellín, Colombia, para participar de su formación en el área de catequesis, en el Instituto Teológico Latinoamericano.
Juzgó que para él, concluir su vida de párroco en la colonia Industrial Aviación representa “una experiencia muy bella donde las inquietudes sacerdotales que uno acaricia desde la juventud del sacerdocio, fue haber realizado lo que la iglesia de hoy va buscando”.