En residencial Bosque de Santa Rita, ubicada en Villa de Pozos, residentes colocaron lonas para advertir sobre la instalación de aljibes en las viviendas y la falta de funcionamiento frecuente de la plataforma de garantías, lo que genera dudas sobre la eficacia de las garantías ofrecidas en la venta de casas.
Francisco Eduardo Naif Gallegos, presidente de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI), señaló la necesidad de una mejor coordinación y regulación entre inmobiliarias, constructoras, compradores y la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) para evitar problemas durante la compra y venta de viviendas. “Es fundamental garantizar que tanto los comercializadores como los compradores no enfrenten situaciones negativas en el proceso de compra-venta”, subrayó.
La Profeco informó que la reclamación por incumplimiento de garantías en viviendas nuevas es el séptimo motivo más frecuente por el que los consumidores acuden a la institución.
La normativa vigente busca asegurar que los servicios de comercialización realizados por fraccionadores, constructores, promotores y demás proveedores cumplan con los requisitos necesarios para brindar una efectiva protección al consumidor, evitando abusos y asegurando la equidad y seguridad jurídica en estas transacciones.
Naif Gallegos destacó que, en ocasiones, la Profeco involucra a los agentes inmobiliarios para resolver problemas de garantías, aunque su papel se limita a la venta de las propiedades. El verdadero compromiso de asegurar que las viviendas estén en condiciones óptimas recae en el desarrollador.